capitulo 8

38 11 4
                                    

Dios.

La puerta se cerró luego de que Ada salió y Elizabeth suspiró, miró a Saha y sonrió, Memphis lo noto al instante.

-Bueno Memphis, bienvenido, mi nombre es Rafael Saha, jefe del interpol y amigo personal de Marchisio, además de maestro de tu amigo Charles cuando aún estaba en preparación, ellos me pidieron que te aislará del equipo si veía que fuera Seth el que andaba suelto-

-Ya se me hacía raro que no hubiera castigo para mí, yo iba a ayudar al interpol de todas maneras-

El general sonrió -según llamándome general Saha, no quiero que los demás piensen que tengo favoritos, tu misión, debido a tu desventaja, es permanecer vivo, ya que según lo informado por tus amigos, fueron alrededor de diez almas las que escaparon y tu poder será útil con el resto-

-Lo entiendo...- dijo Memphis

-Han habido fenómenos donde la gente se ha salvado de milagro en algunos accidentes de ciertas zonas del país, lo cual nos hace pensar que hay más dioses, a penas tengamos información concreta te informaré.-

-¿Los chicos a los que golpeé eran parte de la estrategia para separarme del resto?-

-para nada, ellos eran unos buenos agentes, pero hace algunos años evitaron un ataque terrorista grande y su mente se trunco, se creyeron demasiado y comenzaron a cometer errores,  las cosas se pusieron difíciles, Elizabeth es mi nieta y la crie bajo las normas fuerte y estandarizadas, ella no dejaría que le pusieran un dedo encima, pero su padre era británico y estudio allá, nadie sabe que tiene rasgo sanguíneo conmigo, así que te pido que la cuides dentro de lo que tu puedas, ella tiene acceso a todo el lugar, conoce Egipto de memoria y además, si sobreviven y tienes problemas en Inglaterra se que ella será feliz de acompañarlos-

Memphis la miró y preguntó -¿porque quieres cazar dioses?-

-En Inglaterra, o británia como se decía antes, las personas son criadas bajo el eterno legado de Arturo Pendragon, y su búsqueda eterna del santo Grial, yo me crie bajo la leyenda de Merlín, Galajac, Percival y Bors, aunque sean leyendas solo buscan el cáliz de cristo, la existencia de otros dioses me parece profana y oscura-

Memphis rompió a reír a carcajadas, y Elizabeth lo miro bastante indignada, pensó que no sería correcto decirle, yo soy el heredero de Bors, así que solo dijo -veo que no soy el único loco aquí, siempre me han apasionado las reliquias de cristo-

-Memphis, tus amigos ya están por irse, deberías ir a despedirlos- dijo Saha y ambos asintieron, voltearon y se dirigieron a la puerta.
___________________

La puerta de atrás de furgón se cerró de golpe, Alex estaba junto a Annabel , mientras las demás chicas se acercaban lentamente.

-Bueno, creo que esto es todo- dijo Alex con la espada de Memphis en sus manos -esto lo devolveré a Memphis, pero el resto de nuestro equipaje está listo-

Annabel se colocaba un estuche con cuchillos en el cinturón y luego uno en su pierna, vestía totalmente de negro, eran ropas ajustadas, cualquier persona que la viera sabría que pertenecía a los militares, June, Ada y Helena llegaron en ese instante, todas vestían de civil.

-Que aburridas son, ¿donde está ese espíritu combativo?- dijo Annabel

-Se quedó en Roma- dijo June y Alex rompio a reír

-Asi se camuflaran con las personas, a Annabel no le interesa eso- Memphis al abrir la puerta del edificio -y esa espada es mía-

Alex le lanzó la espada y Memphis la atrapó.

-Las romanas son extrañas, yo jamás me vestía así- dijo Elizabeth señalando la ropa de Annabel -esos bototos deben pesar una tonelada-

-Cada quien con sus gustos, yo aquí soy solo una turista de vacaciones, no quiero salir en mis fotos con uniforme militar- dijo Ada.

Tártaro II, La maldición del arquero (Historia Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora