capitulo 18

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Ley

-Buenas tardes señoritas- dijo la joven que acababa de entrar y quedarse junto a la puerta, debido a que la luz era muy tenue y solo se veían las siluetas de las cosas no lograban ver los detalles de aquella persona, o sus rasgos faciales. -el señor Saha me a asignado como su abogada y grabaré todo lo que hablaremos, lo tipearia en mi computadora pero me han dicho que no debo encender luces frente a ustedes, no más allá de luz ambiente debido a la luz que libero la explosión-

-Tienen acento en español es bastante normal para mi- dijo June -¿de donde eres?-

-De Chile, El capitán me ha pedido este favor y me dijo que habían un par de chilenos en el grupo, por lo que será más fácil para mí lidiar con ustedes-

-No entiendo porque necesitamos una abogada, nosotros no hicimos nada- dijo Helena. - a demás nisiquiera sabemos tu nombre-

-mi nombre es Bárbara y no soy tu enemigo, al contrario, a mi me pagan por ayudarte, así que te pido de una manera cordial que cooperen- dijo seriamente

-Armate de paciencia Bárbara, ellas son de personalidades muy distintas, no hay un patrón a seguir- dijo Elizabeth

Bárbara suspiró, por lo que veía el caso era difícil de por si, pero lidiar con varias personalidades lo complicaría un poco más.

-Haber, partiremos con lo básico y luego quiero que me cuenten lo que pasó- dijo Bárbara

-Pues nosotras llegamos a lugar de la explosión y todo era una nube de polvo, cuando la nube se despejó vimos a un hombre de mediana edad vestido de negro, luego una luz nos segó y llego la policía- explico June

-¿de donde provenía la luz?-

-No lo sabemos, solo que era una luz muy fuerte, como si miraras el mismo sol- dijo Helena

-Esos concuerda con su diagnóstico médico, tienen danos en la retina similares a los que se producen después de un eclipse solar total, cuando es observado sin la protección adecuada- dijo Bárbara-¿pudieron ver algún rasgo del culpable?-

Todas negaron con la cabeza al mismo tiempo.

-¿donde estaban a la hora de la explosión?- preguntó Bárbara

-Estábamos en el último piso del edificio que está sobre esto- dijo June

-Adelante- excepción de mi, que estaba con un joven llamado Memphis en la habitación de tiro- dijo Elizabeth

-¿hay cámaras en los pasillos del hotel de la superficie?-

-Si las hay, además de que las hay en la puerta, verán que salimos después de la explosión- dijo Elizabeth - aunque dudo que sea tan sencillo-

-No lo será- dijo Annabel -deberan tener algo para explicar semejante desastre-

-Pero nosotras no hicimos nada- bufó Helena -no pueden inculparnos de algo así-

-Es obvio que ustedes no estaban ahí para la explosión, habría sido un suicidio, llegaron después, pero nada indica que ustedes hayan iniciado algún dispositivo a la distancia.- explico Bárbara

-¿nos estás inculpado?- preguntó Helena con evidente molestia

-No, solo trato de pensar como la policía, para preparar una defensa acordé a nuestras necesidades-

-Por donde se vea es complicado- dijo Annabel -yo como agente se que mientras tengas una especie de "culpable" no dejaras que se te escape, además, no sabemos cuántas personas murieron en la explosión-

-Murieron 238 persona, de las cuales 42 eran agentes de la policía local, ya que ahí tenía uno de sus tantos cuarteles- dijo Bárbara en un suspiro

El silencio fue total y Ada que había permanecido en silencio preguntó -¿hay alguna manera de salvarnos?-

-Si- dijo Bárbara -seria todo más sencillo si el grupo terrorista que hizo este acto, se lo adjudique, a lo cual, serán investigadas y si ninguna tiene relación con el grupo, las dejarían en libertad-

June miró a Elizabeth y dijo -creo que eso será complicado-

-Además solo vimos una persona, no un grupo- dijo Helena

-Si fue un ataque a la policía, quizás algo detonó su decisión- dijo Ada - quizás algo que haya pasado en ese cuartel-

-lo lamento pero no tenemos registros de lo que ocurrió en ese lugar- dijo Bárbara

-Entre más lo pienso más complicado se vuelve- dijo Ada

-Ahora el único que puede moverse es Memphis- dijo Annabel

-Dudo que haga algo- dijo Helena - Annabel le dijo que no se metiera en problemas-

-Como si el fuera a hacer caso- dijeron June y Ada al mismo tiempo

-No me lo recuerdes- dijo Annabel, - se que no me hará caso, nos metimos en problemas nosotras y el me lo hechas en cara-

Bárbara sonrió, por alguna razón sintió que ese chico era quien unía a todas esas personas, aunque Elizabeth era la única al margen, como ella.
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Seth levantó su bastón y vio como las arenas cubrían a los cuatro jóvenes que su hermano le había llevado como sacrificio, aunque para poder llevar a cabo su propósito, necesitaría más, estaba conforme para ser solo los primeros días de su futuro reinado.

-No puedes negar que hice un buen trabajo, te traje a los agentes que más odiaban a los idiotas romanos-

-Gracias, pero no será suficiente-

-cuatro es mejor que ninguno ¿no?- preguntó

-Claro hermano, pero Horus me busca y yo no tengo nada que ver en sus problemas, si quiero apoderarme de Egipto debo deshacerme del Hijo de Osiris.-

-y la historia se repite, Horus contra Seth- dijo el agente con un Bostezo mientras veía las cuatro siluetas de los guerreros de Seth, medían más de dos metros y la arena les formaba una musculatura impresionante.

-El primero de la derecha irá al interpol y destruirá lo más posible, el segundo irá al borde del desierto y atraerá a Horus, los dos restantes me ayudaran a acabarlo, aunque me tomaré unos días para madurar mi plan, mis movimientos y ver el alcance del poder de los soldados-

-Entonces yo volveré al interpol para que nos sospechen de mi- dijo poniéndose de pie

-Hasta pronto hermano, y estos soldados jamás te tocarán-

-Mas te vale...- rió el agente.
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Saha caminaba impaciente por su despacho, en una gran pantalla tenía dos cámaras, una en la enfermería y otra en el centro blindado. Las cosas se habían complicado y no podía saber que dirección tomarían la historia desde este momento, era algo superior a el y había involucrado a su nieta en eso, tenía un mal presentimiento. Miró hacia el rincón más oscuro del su oficina y vió que no había nada, desde la llegada de los extranjeros, su visitante había desaparecido, y eso lo inquietaba más, se sentía constantemente vigilado pero no podía decirle a nadie, y los que le creerían, irían tras aquella presencia. Suspiró, y miró la pantalla donde las cámaras estaban transmitiendo.

En la primera, Memphis estaba de rodillas y con las manos en el piso jadeando, a pesar de que nadie le exigía nada, estaba exhausto, el sudor caía al suelo mientras Alex lo miraba sonriendo, era la primera vez que veía a Alex sonreír desde su llegada a ese país.

En la segunda imagen se veía una sala casi a oscuras, con las chicas hablando, haber designado a una extranjera a ese grupo había sido una buena idea, quizás cuando se dieran cuenta que era de la misma nacionalidad que June y Memphis, podrían entablar aún mejores relaciones, necesitaba todo el apoyo posible.

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Superar la pérdida de alguien importante es difícil, pero de alguna manera debemos encontrar el camino correcto por el cual avanzar, la rabia y la pena no deberían dominar nuestra vida restante.

Tártaro II, La maldición del arquero (Historia Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora