The Little Girl Is Gone⌠Supernatural⌡

Capítulo 24

Molly tomó al demonio de la camisa y lo lanzó hasta el otro lado de la sala, lo suficientemente lejos para que le diera tiempo de poder tomar el cuchillo de Ruby. Exhaló cansada y se limpió los labios de su propia sangre, caminó hasta una esquina, donde yacía el cuchillo, y para cuando giró, el demonio había dibujado un signo contra ángeles en la pared con su sangre. El poseído sonrió maliciosamente y tocó el signo, ocasionando que una luz saliera de este y que Molly gritara de dolor al mismo tiempo que en sus brazos se notaban sus venas sobresaliendo. Los gritos de la nephilim no cesaron, sino hasta que aquella criatura del infierno se aleja del signo y ahora caminara hasta ella aún con aquella sonrisa triunfal.

  — ¿Sorprendida?—   ríe. La castaña lo miró mal desde el suelo, ya que estaba tan débil que le parecía que iba a desmayarse en cualquier momento. El demonio se agachó hasta ella y le quitó el cuchillo con facilidad.— Ahora que sabemos quién eres, es mucho más fácil. 

La castaña seguía intentando recobrar fuerzas, trató de ponerse de pie, pero el demonio le dio una patada en el abdomen y la hizo caer nuevamente.

  — ¿Sabes? te recuerdo— sonríe— a ti y a tu hermana— caminó lentamente al rededor de ella. La nephilim levantó la mirada.— Sí, yo estaba ahí cuando la asesinamos. Y debería entregarte a Lucifer, pero... bueno, él no está disponible gracias a los Winchester. Honestamente, ya estoy cansado del drama de buscarte.— al segundo de terminar de decir esto, la apuñaló directo en el corazón. Ella lo miró unos segundos y cayó sin vida.

De pronto, alguien golpeó al demonio en la cabeza con una silla, dejándolo noqueado por unos minutos. Era Sam, quien había estado luchando contra otros demonios en el piso de arriba. El Winchester se acercó hasta su novia.— Molly, vamos, regresa. Molly...—susurra quitando el cuchillo incrustado en su pecho. — Molly...

La muchacha abrió los ojos e inhaló oxígeno mientras se sentaba, siendo aún resguardada por los brazos de Sam. 

— Estoy bien.— sonríe mirándolo a los ojos. El castaño sonrió.

Molly se dio cuenta que el demonio estaba recobrando la conciencia, entonces tomó el mismo cuchillo con el que él la había asesinado, se puso de pie y le hizo lo mismo. De aquel recipiente salió una luz roja que indicaba que el demonio había muerto; pero eso no le importó y siguió apuñalando lo repetidas veces con furia recorriendo cada parte de su cuerpo. La sangre le salpicó en el rostro en las manos, mas no se detuvo, entonces sintió las manos de Sam en sus hombros, en un intento de tranquilizarla.

  — Molly, se ha ido.— toma el cuchillo y lo guarda.  Ella lo miró con los ojos llorosos — Tranquila— la abrazó.

— Él asesinó a Beatrice, Sam.—solloza  — Él la asesinó.

— Éstarás bien, Mol.

— Él dijo que Lucifer estaba buscándome— se alejó de él para verlo a los ojos. El castaño frunció el ceño intentando comprender.

— ¿Dijo por qué?

— No.— se limpió las lágrimas con sus manos.— Quizás fue él quien envió a los demonios.

— Tú viajaste en el 2006, en ese año él estaba libre.— recuerda mientras le ayudaba a ponerse de pie.

— ¿Qué crees que...— se sintió débil y casi vuelve a caer, si no fuera porque el Winchester la sostuvo.

— Mol, ¿estás bien?

  — Sí, solo fue un mareo. Yo estoy...— y cerró los ojos desvaneciéndose en los brazos del cazador.

  — Molly, Molly, despierta, Molly— repetía con desesperación.