Capítulo 33

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LUCHA

(Narra: Borislav)

Después de que la anciana me enviara a reagruparme con mi dragón junto a la Nigromante, emprendimos el viaje en busca de encontrarlo y traerlo conmigo. Cuando finalmente volvimos, encontramos que le había dado la tarea de atrapar a un cerdo al Mago, al Elfo y al Hada. Parecía haberles costado mucho atraparlo, pues parecían un poco golpeados por el animal. La anciana hizo la petición de que el animal fuera asesinado, petición a la cual me propuse a ayudar. Sin embargo, después de dar el golpe de gracia al animal, logró soltarse de mis manos y salir corriendo despavoridamente por todo el jardín de la mujer, llenando todas las plantas de sangre. Cuando finalmente se desvaneció, la anciana me pidió que lo llevara hasta su cocina. Lo dejé postrado dentro de una enorme tina, parecía que iba a sacarle las vísceras. Pensaba que me pediría que también lo limpiara, pero no fue así. Ella tenía una tarea diferente planeada para mí. Me encomendó la tarea de limpiar el desastre de sangre que el animal había dejado por todas partes. Junto con el Mago y el Hada, nos pusimos manos a la obra mientras la mujer se llevaba al Elfo y la Nigromante dentro de la posada.

-Bien. Supongo que debemos ponernos manos a la obra. Terminaremos pronto si nos apresuramos- Dijo el hada.

Puse mis dedos sobre la sangre, se estaba secando. Debíamos apresurarnos y retirarla o se secaría y sería un gran problema limpiar las manchas. El Mago tomó su cetro y lo apuntó hacia una de las manchas que se encontraban en el suelo. Un pequeño chorro de lo que parecía ser vapor, salió de la punta del cetro y comenzó a desvanecer lentamente las manchas de sangre. Quizás el trabajo sería mucho más rápido de lo que había pensado anteriormente. El Mago comenzó a desvanecer mancha tras mancha, a una velocidad vertiginosa, al menos comparada con la velocidad normal de limpiar algo como las manchas de sangre. Después de un rato de limpiar sin dejar que lo ayudásemos, el Mago terminó de quitar todas las manchas de sangre.

Casi instantáneamente, la anciana salió por la puerta de la posada y caminó hacia nosotros.

-¿Qué tal les está sentando el trabajo, jóvenes?- Preguntó.

Miró el patio terminado y puso cara de asombro y gusto. Seguramente no esperaba que estuviera listo tan pronto. Y seguramente tampoco esperaba que el mago lo hiciera todo él sólo...

-Vaya, vaya... Veo que terminaron. Son buenos limpiando. Su trabajo es excepcionalmente rápido. Creo que ustedes tienen cierta habilidad para hacer limpieza.

-Desafortunadamente, sólo uno de nosotros hizo el trabajo. No pudimos hacer nada mejor que él- El hada señaló al mago –Tiene una habilidad excepcional, pero no podríamos hacer demasiado para ayudarlo.

Ante las palabras del hada, la expresión de la anciana cambió drásticamente. Pasó de ser una expresión de satisfacción, a una totalmente sería y pensante. No le agradaba haber escuchado aquellas palabras.

-Muy bien. En ese caso, vamos a pasar a otra cosa. Desafortunadamente, todas las labores están ocupadas. Así que, ¿Qué les parece si se relajan un poco y entrenan sus habilidades para esta noche? Van a necesitar dar lo mejor de ustedes mismos, si lo que quieren es salir victoriosos- La mujer llevó sus manos a las bolsas de sus ropajes y cerró los ojos, meditando algo. Después de un momento, se acercó a mí y tomó mi mano, entregándome un pequeño objeto, para luego volver la mirada hacia el Hada y el Mago –En este momento, le he entregado a Borislav una pequeña llave de oro. Formarán equipos de dos para quitársela, y él debe evitar que arranquen esa llave de sus manos. Hada, mago, ustedes serán equipo y lucharán contra el Domador que tienen aquí.

Todo iba bien hasta que me percaté de que sólo había tres de nosotros, entonces miré a la anciana... ¿Iba a luchar a mi lado?

-Tu tampoco lucharás sólo- La anciana se dirigió a mí –Lucharás con el único compañero que tienes que, por ahora, es quien mejor te entiende. Juntos pueden luchar como uno sólo, y pueden ser un equipo verdaderamente formidable e implacable. Un verdadero reto para ellos dos. Joven Domador, tu lucharás con tu dragón.

MoiraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora