QUÉDATE CONMIGO 2.

MARTES

Clarke estaba tumbada en su sofá tratando de descansar un poco su mente y cuerpo, había sido una dura mañana para comenzar un martes, con tres reuniones donde cuestionaron su trabajo a primera hora de la mañana, la llamaron desde el colegio de su hija, avisándole que Lexa estaba en Urgencias debido a un alimento que había ingerido y le había causado alergia, alergia a los cacahuetes, para ese entonces casi le da una parada cardíaca, contactó con su madre, para que se quedara con su hija, ya que sus dos amigas no estaban disponibles y Richard, tenía el juicio del siglo o así lo llamaba él. A la vuelta a su trabajo casi se choca con un una camioneta y nada más poner un pie dentro de su empresa, Spencer la esperaba en la entrada avisando que  Jasson Cabano, el pez gordo de la ciudad, se había presentado sin nisiquiera haber marcado una cita para solicitar su trabajo. Claro que no se pudo resistir a decirle a Spencer que lo enviara a su casa y si quisiera solicitar su trabajo que marque una reunión como todos los demás, pero cambió de idea cuando su secretaria le informó que su presencia era para encargarle el nuevo centro comercial de la ciudad. Acabó su mañana firmando los papeles para el nuevo proyecto, sabía de antemano que Jasson era exigente y también sabía a quién le iba a encargar la tarea de realizar el plano y la maqueta del nuevo proyecto, ni más ni menos  que a la nueva integrante cual curiosamente aún no sabía su nombre pero que llegaría mañana. Quizá era un poco precipitado dejar un proyecto importante en manos desconocidas, pero quería conocer el trabajo de su nueva empleada en persona y esa era la forma más rápida.

-Hola guapetona.-Una voz hizo que Clarke se incorporara.

-¿Qué haces aquí?-Fue lo primero que dijo al ver a su amiga en su despacho.

-Joder nena yo también me alegro de verte.-Le contestó Raven girando sus ojos.-Te traje un café y un Donuts de chocolate, tu favorito.-Le sonrió sentándose a su lado. Clarke supo por anticipación que pasaría a continuación.

-Suéltalo.-Le dijo Clarke tomando un sorbo de su café.

-Necesito que te hagas pasar por una de mis conquistas.-Le respondió sin rodeos.

-Ni hablar, no pienso hacer el ridículo.

-Vamos Clarke, es por una buena causa…-Le miró con suplicio, a Raven se le daba bien el dramatismo y sabía que su amiga siempre caía en el.

-¿Cual es la causa?-Preguntó Clarke antes de dar un mordisco al bollo.-Mmmmm delicioso.-Dijo cerrando sus ojos al saborear el chocolate del donuts.

-Pues llevarme a la cama la secretaria de mi jefe.

-¿Y se puede saber qué pinto yo en todo eso? tu nunca necesitaste ayuda para llevar a alguien a la cama...

-Lo se…-Suspiró la morena de forma dramática.-Lo que pasa es que  Jennifer, no me manda señales claras y eso me confunde. Y tú como buena amiga me ayudaras a resolver mis dudas.

Hacia más o menos ocho años que Raven no tenía una relación seria, desde que lo dejó con su ex-novia Lauren, porque esta se había enamorado de una compañera de su clase, Raven no montó el drama del siglo como pensó sus amigas. Entendió el sentimiento de Lauren, porque sabía lo que era estar enamorada hasta las trancas de una persona y no poder tenerla como te gustaría. Finalizaron su relación con buenos términos y desde entonces se pasó de cama en cama, de boca en boca, algún que otro rollo que no duraba más allá de un mes o dos y cuando le preguntaban el porque no asentaba la cabeza, decía siempre lo mismo :''Estoy bien siendo una abeja, ya sabes, de flor en flor.´´

-¿Por qué no se lo pides a Octavia? ella actúa mejor que yo.-Intentó escabullirse la rubia.

-¿Estás de coña? Octavia me mandaría a volar, además ella tiene novio.