Era jueves y acababa de salir de una presentación de un nuevo proyecto que le encargaron, estaba en el ascensor con su habitual vaso de café entre sus manos pensando las palabras exactas para dirigirse hacia la ojiverde, pues nada más salir del ascensor se dirigió hacia el despacho asignado a Alycia. Toco tres veces la puerta con su puño en espera de que le diera el paso pero no escuchó nada del otro lado y decidió entrar sin más arrepintiéndose en ese instante, pues se encontró con una imagen bastante perjudicial para su humor.
La ojiverde estaba de espaldas a la puerta apoyada con una de sus manos al gran ventanal de cristal y con el cuerpo ligeramente inclinado, su traje se ceñía perfectamente a sus curvas, algo que no pasó desapercibido para Clarke fue como lucía su trasero en el pantalón de esmoquin color granate que llevaba puesto; se mordió el labio inferior de manera inconsciente y cuando se dió cuenta de lo que hacía, trago hondo ante la maldita punzada que sintió en su entrepierna.
-Oh vamos, ya te dije que ese cacharro y yo nos odiamos.-Escucho a la ojiverde e intuyó que hablaba por teléfono.
-Buenos días Alycia.-Decidió hablar por el claro motivo de que la ojiverde aún no había notado su presencia.
-Joder.-Dijo la morena dandose la vuelta y colocandose una mano en el pecho, se había llevado un pequeño susto, algo que logró dibujar una pequeña sonrisa en el rostro de Clarke.-Ammmm...mmm mamá hablamos más tarde.-Habló Alycia al teléfono.-No mamá me mmm...me pasaré más...más tarde y hablamos tranquilamente.-Clarke frunció ligeramente el ceño por el tono nervioso de la morena, cerró la puerta y se acercó al escritorio con la atenta mirada en Alycia.-Ra...ratita riega las plantas.-Su desconcierto fue más cuando escuchó eso por parte de la ojiverde quien se había sonrojado ligeramente.-Adios, te cuelgo.-Miró aún sonrojada hacía Clarke quien hacía su mayor esfuerzo por no sonreír.-Buenos días Clarke.
-¿Ratita riega las plantas?-Contestó la rubia aguantando la sonrisa.
-Amm...es mmm...un libro infantil que leía de pequeña.-Dijo sonrojándose aún más y para ese entonces Clarke no aguantó más y sonrió.
-Ya y...¿Y de qué va?-Preguntó la rubia alzando una ceja, sabía de sobra que Alycia se estaba inventando todo y más cuando sabía que a la ojiverde odiaba los ratones; un detalle que no se esperaba recordar de su pasado, pero ahí estaba tomándole un poco el pelo.
-¿El qué?-Preguntó y abrió los ojos cuando se dió cuenta de lo que dijo.-Ahh el libro...pues...es...es de una ratita que riega las plantas.-Contestó y se sentó en su silla de forma nerviosa, Clarke giró sus ojos y negó con la cabeza antes de sentarse delante de Alycia, ahora estaba molesta, molesta por haber sonreído y por gustarle el sonrojo de la morena ante su patético intento de improvisación.-¿Necesitas algo?-Preguntó la ojiverde tratando de cambiar de tema.
-Sí, vine a decirte que harás también la presentación del proyecto.-Le respondió la rubia con su semblante más serio, para ese entonces Alycia estaba saltando interiormente por haber hecho a la rubia sonreir, sonreir de ella, pero le dio igual, tanto que ni siquiera se molestó en tener que hacer también la presentación del proyecto. Cuando se vió interrumpida por la rubia minutos atrás, estaba hablando con Raven, quién intentaba que la ojiverde entrara en razón de hacer los planos por ordenador, algo que Alycia odió la idea, pues desde la Universidad había rechazado por completo hacer planos mediante programas informáticos, no es que no sabía manejarse con ellos, más bien quería evitar lanzar su laptop contra la pared.
-Vale, no hay ningún problema.-Le sonrió a la rubia.
-Ya y...¿Cómo te va el proyecto?-Preguntó Clarke esta vez con una sonrisa fingida, por lo que Alycia decidió jugar un poco a sus cartas.
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QUÉDATE CONMIGO 2.
FanfictionSegunda parte de QUÉDATE CONMIGO. Portada por: @GabaSantos.