love under rain ･ frerard

Capítulo 45: El acuerdo

 

Gerard se giró de inmediato ante sus palabras, buscando la presencia de alguien más que escuchara su conversación a hurtadillas, pero sólo eran ellos dos. Suspiró fuertemente y lo miró a los ojos, el muchacho se veía decidido, mucho más decidido que la primera vez que se encontraron a solas, meses atrás. Zacky lo miró también, apretando los puños y presionando mucho los labios. Inspiró y lanzó el cigarrillo lejos, Gerard no decía palabra.

— Sé que teníamos un trato, fui yo quien lo propuso después de todo —dijo entre dientes— Pero después de estar viéndolo a escondidas durante todos estos meses… caí en cuenta de que si seguía escondiéndome lo perdería, los perdería, para siempre. No voy a perder a mi familia Zachary, no contra alguien que dejó de mojar la cama hace sólo un par de años, no contra ti.

— Disculpa, creo haber escuchado mal… —Zacky alzó una ceja, mirándolo divertido— ¿Dijiste tu familia, cierto? Ellos no son tu familia Gerard, puede que tú hayas metido tu pene ahí, pero yo soy más padre de esos bebés que tú y lo sabes, Frank lo sabe. Ya lo perdiste Gerard, Frank me ama y no puedes hacer nada contra eso —sonrió intentando ocultar así lo titubeante en sus palabras. Sabía que no tenía la certeza de nada de eso y que era posible que, al preguntar si realmente era amado por él, terminara perdiendo. Pero valía la pena intentarlo.

— El asunto es… En nuestro trato estaba dispuesto que cuando yo regresara, tú te harías a un lado —Gerard exhaló el humo del cigarrillo, mirando cómo este se difuminaba frente a sus ojos.

— Lamento decirte que no planeo, nunca planee, cumplir esa parte del trato, perdiste. Viejo abusador de mierda. —Zacky lo miró a los ojos nuevamente, Gerard tembló. Sonrió al ver que él tenía ventaja esta vez y, dedicándole una mirada de primera plana a su dedo de en medio, regresó al edificio.

Gerard golpeó la baranda con ambas manos y apretó los dientes para no gritar. Maldito era el día en que había decidido utilizar a aquel idiota para seguir teniendo información de Frank después de que sus amigos le dieran la espalda y lo alejaran de él.

Había sido un idiota al confiar en ese tipo que todo el tiempo estuvo enamorado de Frank. Quizá desde antes que él, pero no con mayor intensidad.

— Hijo de puta… —masculló encendiendo otro cigarrillo. Ni Zachary, ni sus propios errores lo alejarían de Frank y su nueva familia. Ya lo había decidido.

…

(Meses atrás)

 Cuando despertó al otro día, lo primero que sintió fue el dolor en el rostro y recordó; Quinn lo había abordado y lo había golpeado en nombre de Frank. Sonrío lacónico, lo merecía. Pero demonios, dolía.

Los recientes sucesos con respecto al menor parecían ser sacados de una pesadilla o una mala broma. Era increíble cómo todo su hermoso castillo de arena se había desmoronado de pronto. Frank había descubierto su vida, lo sabía todo y además, estaba esperando un hijo suyo. Ese chico que todavía no cumplía su mayoría de edad, estaba embarazado de él.

Todo se había ido a la mierda.

Recordó cómo había reaccionado al enterarse de todo, como había intentado persuadirlo para que no lanzara su futuro por la borda y siguiera con su vida, sin un hijo que lo arruinara todo. Pero Frank no veía las cosas desde ese punto de vista, Frank siempre había sido tan especial con  su opinión diferente para todas las cosas. Frank…

Pero ya nada podía hacer, la había cagado monumentalmente. Frank, era posible que no quisiera volver a verlo y lo merecía. Aunque se le hacía increíblemente difícil imaginar un futuro sin ese adolescente de vibrantes sentimientos junto a él.