Secret Love #RedQueenAwards

Capitulo 14 *Pasado*

Naraku llego a su casa, sus padres no estaban en la sala, suponía que ya estaban en su habitación o tal vez habían salido a alguna cena. Subió las escaleras y se dirigio a su habitación. Encendió la luz una vez que entro y frunció el ceño.

—¿Qué hacen aquí? —pregunto serio al ver a sus padres frente a él.

—¿Cuanto tiempo pensabas mentirnos? —pregunto Hitomiko, ignorando la pregunta que Naraku les hizo.

—No sé de que hablan —se cruzo de brazos.

—Lo sabemos todo —hablo Onigumo—. Sabemos quien es Kikyo.

Naraku se sorprendió al escuchar eso, más no mostró sorpresa u otra expresión en su rostro. Hitomiko se acercó a él y sin darle tiempo a reaccionar le dio una bofetada. Naraku ladeò un poco el rostro ante el golpe.

—Eres un mentiroso —dijo molesta la mujer—. Yo no te eduque para que dijeras mentiras.

—Calma —pidió Onigumo—. ¿Cuando pensabas decirnos la verdad?

—Pronto, esperaba decirlo yo... —respondió serio.

—Tienes prohíbo volver a verla —dijo su madre molesta. Naraku frunció el ceño y los encaro.

—¿Me prohíben? —quiso reír, pero no lo hizo—. Ya no soy un niño al que puedan decirle con quien estar y con quien no —dio un par de pasos hacia su padre—. ¿Qué paso con eso de que debíamos tratar a las personas por igual fueran o no de dinero? —pregunto molesto, mirando a su padre.

—Esto es diferente.

—¿En qué sentido? —lo encaro.

—Tu abuela dejara que te hagas cargo de sus negocios por unos años, pero para ello debes casarte con alguien de sociedad.

—Esa maldita vieja... —susurró.

—Cuidado el como hablas de tu abuela —regaño Hitomiko.

—¿Desde cuando la respetan tanto? Si hace menos de dos años ella les dijo que yo y Kagura no eramos sus nietos aunque compartiéramos la misma sangre.

—Estaba molesta —explico Onigumo—, ella quiere lo mejor para ustedes.

Naraku no lo evito y soltó una carcajada, no podía creer lo que estaba escuchando.

—¿Quién les dijo la verdad de Kikyo?

—Eso no tiene importancia.

—¿Fue Kaede?

—Tu abuela tiene cosas más importantes que hacer que estar vigilando a una muerta de hambre como Kikyo —dijo Hitomiko.

—Yo contrate un detective —hablo Onigumo—. Él se encargo de decirnos la verdad de esa chica.

—¿Qué más les dijo?

—Nada más —respondió serio—. Así que ya oíste a tu madre... por tu bien y el de esa chica es mejor que dejes de verla.

—¿Me estas amenazando?

—Es una advertencia —dijo fríamente.

Naraku negó lentamente con decepción, dio la vuelta para irse no pensaba quedarse ni un minuto más si ellos seguían en ese plan.

—¿A dónde vas? —pregunto Hitomiko al ir tras él, Naraku estaba por bajar las escaleras.

—A buscar a mis padres —dijo con decepción, pues no podía creer que sus padres se dejaran influenciar por Kaede.

—Si das un paso más... —hablo Onigumo y Naraku lo miro de reojo—... ya no volverás a poner un pie en esta casa —sentencio.

Naraku no dijo nada, simplemente siguió su camino a la salida.