Tú Eres Lo Único Que Me Queda

10.9K 730 438
                                    

Por alguna razón no puedo controlar los secretos que llegan a mi vida. Cada secreto que descubro es como si desordenaran mi vida, cambia mis pensamientos y golpea en mis sentimientos. Me siento insegura de mi vida, tal vez aún queden más secretos y no me puedo dar el lujo de acostumbrarme a una mala vida.

La directora, que dice ser mi tía, me esta llevando a mi casa en su auto, ella va manejando y yo voy en el asiento del copiloto. En mis manos llevo una fotografía antigua de la directora; en ella aparecen dos niñas sonriendo a la cámara, la niña que está a la izquierda tiene trenzas y un lindo vestido: es la directora, y la otra niña que esta a su lado lleva el cabello suelto y también un lindo vestido lleno de lodo, nunca conocí a mi mamá pero siento en el rostro de esa pequeña que no hay duda alguna de que sea ella.

-Te pareces un poco a ella -me dice con la vista en la autopista.

Sigo observando fijamente a mi supuesta madre de pequeña.

-¿Mis padres saben de esto? -pregunto seria.

La directora se queda un momento callada, volteo a verla exigiendo una respuesta:

-¿Señorita directora?

-No -responde seca.- Sentí algo en ti y me recordabas mucho a Lauty pero ¿como les iba a decir a tus papás que yo era tu tía? Me iban a tomar por loca.

Miro al frente, navego en mis pensamientos. Tal vez lo que dice la directora sea cierto; la tomarían por loca.

-¿Jeff la conoce a usted?

-¡Puff! -exclama.- ¡Claro que me conoce! De toda la familia yo era la única que sabia el romance secreto de mi hermana.

-Y... -tengo miedo de pronunciar esa pregunta pero la curiosidad me mata.- ¿usted no intento detener a mi mamá cuando se fue con Jeff?

Otra vez, otro incómodo silencio. Ella sabe la respuesta pero supongo que le duele admitir la verdad.

-Tu madre se volvió rebelde gracias a Jeff -responde.- Sólo una mañana ya no estaba en su habitación y lo único que dejó fue una carta de despedida.

-¿No tuvo alguna comunicación con ella?

-Por supuesto que si: la mayoría del tiempo me enviaba cartas o emails, así fue como me entere de que estaba embaraza de ti, le suplique que regresara a la casa y ahí estaría a salvo durante su embarazo pero no quiso, creyó que nuestros padres la iban a aborrecer por tener un hijo de un asesino pero no fue así, nuestros padres querían que regresara... Nunca lo hizo... Pasaron los nueve meses y no recibí más cartas de ella... Y una noche... -puedo escuchar como se le corta la voz.- Jeff regresó a la casa solo, para decirnos que Lauty estaba muerta.

No pregunté más cosas, parecía que le dolía recordar a su hermana. Por lo menos Jeff tuvo la decencia de informarle a la familia que había muerto su Lauty.  Yo perdí a una madre, sin embargo, no sólo fue una madre, fue hija, hermana, amante y amiga. Y todas esas personas la conocieron mucho mejor que yo, su dolor debe ser más fuerte que el mio.

Al cabo de unos minutos llegamos a mi casa, se estaciona alado de la banqueta, mi madre y padre están afuera en la puerta con unos abrigos, salgo del auto de la señorita, lo rodeo y corro para abrazar a mis papás quienes igual me reciben con un cálido abrazo.

-¿Estas bien, cariño? -me pregunta mi madre tiernamente.

-Si mami -me separo un poco.- ¿donde está?

-En tu habitación -responde mi padre.

-De acuerdo.

Entre a la casa dejando atrás hablar a la directora con mis padres. Subí las escaleras y al abrir mi cuarto no encontré rastros de Jeff. Deje mi mochila en el piso, cerré la puerta, camine a la orilla de la cama, vi la caja del perrito y me agache para verlo de cerca.

La Hija De Jeff The KillerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora