Mi vida como D.S.

Capítulo 22. Información.

Tratando de no llamar la atención me apresuré para ir a mi casa a coger la caja.

Al llegar al gremio le entregué la caja corriendo a Aloys. Él la abrió y sacó algo que no pude ver, solo vi que brillaba por la parte inferior.

Aloys- Esto servirá- acercó la extraña planta a la China cinta, con silo un toque se partió y de la cinta solo quedaron cenizas.

Makarov- Qué ha pasado?- parecía aturdido.

Aloys- Lo encontramos atado en el armario.- respondió.

Makarov- Por cierto, quién sois vosotros?- se levantó y empezó a caminar alrededor nuestra.- Poseéis un gran poder mágico.

Me quité la capucha dejando ver mi rostro, Aloys hizo lo mismo, el maestro al verme se emocionó y me abrazó fuertemente.

Makarov- Lucy! Qué alegría verte, después de tanto tiempo...- se separó de mí y miró a Aloys sin saber que decir.- Y tú eres?

Yo- Él es Aloys, él me ha estado ayudando mucho en mi ausencia.- sonreí y Aloys copió mi movimiento.

Aloys- Si, he sido como un maestro y compañero para ella.- el maestro le dió las gracias por cuidarme.

Makarov- Y a qué habéis venido?- se sentó y nos miró intrigados.

Yo- Yo técnicamente sigo siendo un miembro de Fairy Tail por lo que a Aloys le gustaría unirse al gremio.- dije intentando sonar convincente.- Podría unirse?

Makarov- Claro que sí, para mí ya es de la familia.- se acercó a la puerta y llamó a Mirajane, se dijeron algo que no pude escuchar.

Ella asintió sonriente a todo lo he el maestro le estaba contando, ella al dirigir la mirada hacia nosotros se emocionó y su rostro se llenó de lágrimas. Vino hacia mí corriendo, y me abrazo fuertemente sin soltarme.

Mirajane- Lucy, cuanto tiempo...- se separó lentamente de mí emocionada.- Me alegra ver que estás bien.- se secó las lágrimas y se dirigió donde Aloys.

Le puso la marca del gremio en la mano izquierda, era de color turquesa. Ella se volvió a acercar a mí.

Mirajane- Lucy, se ve que te has echo mucho más fuerte.- atascó su mirada en la marca que había en mi brazo.- Esa marca...- su semblante cambió de alegría a horror.

Yo- Qué pasa con esa marca?- estaba un poco confusa por su reacción.

Mirajane- Mira que tarde es, es hora de irse a casa.- dijo apartando su mirada de mí.- Me acabo de acordar de que tenía una cosa mañana a la que no puedo faltar, adiós.- se despidió y se fue a la velocidad de la luz de allí.

Yo- Qué acaba de pasar?- miré a Aloys, él negaba con la cabeza.

Makarov- Mirajane tiene razón, será mejor que os vayáis yendo a casa, mañana será un gran día.- dicho esto nos echó de su despacho cerrándonos la puerta de golpe.

Yo- Qué mosca le habrá picado?- me rasqué la cabeza pensativa.

Aloys- Ni idea, pero todo había cambiado cuando Mirajane vió tu marca.- la señaló.

Yo- Tienes razón...- me dí cuenta de que teníamos la capucha aún sin poner y me apresuré en ponérmela al igual que el de Aloys.

Mejor prevenir que curar.

Ya averiguarán que estoy en el gremio mañana.

Al llegar a casa solo nos limitamos a recapacitar e investigar un poco todo lo que había pasado en mi ausencia, le pedí ayuda a Crux para infirmarme.

Me contó que al principio todos estaban dolidos por mis actos pero que nunca le dieron importancia porque sabían que esa no era realmente yo. Cuando desaparecí se preocuparon mucho, me empezaron a buscar durante meses, pidieron ayuda al conejo mágico pero a los pocos meses me dieron ya por muerta.

La mayoría del gremio lo acabó aceptando mientras que la otra minoría aún me seguía buscando. Levy, Gajeel, Charles, Happy, Lily y Wendy eran la poca minoría, me decepcioné un poco cuando me enteré de que a los un consideraba mis amigos se dieran por vencido tan rápidamente.

También me enteré de que Lisanna y Natsu empezaron a salir al igual que Levy y Gajeel.

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E aquí el capítulo que anhelabais.

Nos leemos en el próximo capítulo,

T.G.04