Capítulo 19. Proyecto Eclipse.

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Seguí a Babieca aún con Aloys escondido bajo mi capa.

Babieca- Señor Loys, ¿qué le trae por aquí a Garleon? ¿Al castillo específicamente? -se paró enfrente de una casita de madera y empezó a volar alrededor de mí.

Yo- Como dije antes vengo del futuro para avisar a su reina -respondí nerviosa.

Babieca- No me lo creo -dijo. Voló hacia la casa y abrió la puerta-. Aquí en Garleon los viajeros del tiempo no se presentan en el palacio, sino que se dirigen al senado para informar sobre sus futuros. Nadie va al palacio ya que poca gente sabe dónde está.

Yo- Bu-bueno... es que... no.... -no sabía que decir.

Babieca- ¿Por qué estabas allí Lucy? -cuando dijo mi nombre me congelé-. ¿Y qué haces con Aloys?

Yo- Y-yo-yo...

Babieca- No me mires así, te reconocería con cualquier disfraz. Además tus llaves ayudan bastante -me explicó-. Yo te ayudaré Lucy, ahora que no está Igneel puedes confiar plenamente en mí.

Yo- ¿Pe-pero cómo...? -me empujó a dentro de la casa y cerró la puerta.

Babieca- Igneel y yo somos muy buenos amigos, y planeábamos un golpe contra la Diosa desde hace siglos, pero nunca encontramos el momento adecuado -escribió algo en el marco de la puerta. La casa entera empezó a brillar en cuanto se acercó a nosotros-. Cuando naciste supimos de inmediato que te elegirían tarde o temprano, además supimos que podíamos confiar en ti ya que eres descendiente de Anna, una gran amiga nuestra. Cuando el anterior a ti fracasó nos encargamos de poder estar más cerca de ti para protegerte.

Yo- ¿Qué es el proyecto Eclipse, Babieca? -pregunté mientras me sentaba en un sillón.

Babieca- Es una historia un tato peculiar -se sentó en el sillón en frente de mí y comenzó con su relato-. Todo empieza con una niña pequeña de 10 años que se interesó por la magia. Al principio solo era una maga normal y corriente que le fascinaba leer sobre el mundo y sobre todas las criaturas existentes. Esa curiosidad nació a raíz de ser encarcelada por sus padres en una torre por 15 años.

Yo- Es como Mavis -murmuré.

Babieca- Sí, era similar a Mavis, pero no me vuelvas a interrumpir por favor -asentí-. Sigamos, tras años leyendo sobre la amenaza del mago negro Zeref se fue interesando cada vez más y más en la magia negra. Tras meses practicando se convirtió en una maga extraordinaria, escapó de la torre y se unió a un gremio oscuro Blue Dragon. En su estadía allí conoció a Zeref. Él le enseñó los secretos más oscuros de la magia incluido el poder de la inmortalidad. Gracias a eso, tras un intento de atacar la capital, recibió el castigo del Dios Ankhseram, la maldición Ankhseram. En su intento de conquistar la capital se enteró sobre la puerta Eclipse. Se obsesionó a tal punto que empezó a hacer de todo lo posible para recrearlo. Pero no le bastaba con solo invocar dragones, por lo que diseñó un portal para convocar a los Matzerara. Desde entonces empezó a recoger almas de magos celestiales capaces de abrir el portal Eclipse ya que ellos son los únicos capaces de controlar la puerta. Poco después de que nacieras, tu madre, al igual que muchos de la familia Heartfilia, fueron escogidos para el proyecto, pero ninguno fue capaz de controlar la magia desprendida de la puerta lo suficiente para que llegaran los Matzerara. Layla fue la que más se acercó a cumplirlo, por la puerta solo pasó uno antes de que falleciera. Desde ese día hace unos años te hemos estado protegiendo.

Yo- Pero... vi a mi madre en el mundo celestial -dije algo confusa.

Babieca- Esa era la primera fase del plan, ella se presentó en el mundo celestial como Layla. Ella era consciente de que habías conseguido las llaves del zodiaco y esa fue la excusa perfecta para manipularte y tenerte bajo sus garras.

Yo- E-entonces, m-mi madre.... está muerta y n-no viva... -las lágrimas salieron.

Babieca- Si, lo siento mucho -me acarició el pelo para calmarme.

Yo- Te-tengo una pregunta -dije secándome las lágrimas-. ¿Cómo es que un hada y un dragón se han unido para algo así?

Babieca- Me has pillado, en realidad no soy una hada -la miré a los ojos impactada-. Soy una dragona como Igneel.

Mi vida como D.S.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora