Me Robaste el Corazón

Capitulo 33: Un regalo diferente

Días después

He querido quedarme con las cenizas de Raisa pero creo que lo correcto es que lo tenga su familia. La carta que me ha dejado no la he querido leer y la he guardado en un lugar del que no recuerde con facilidad. No quiero abrir aún más heridas, no deseo revólver más mis sentimientos. Mamá ha aceptado escucharme y aunque sigue algo triste me ha perdonado y eso me alivia un poco. Aún sin ánimos, me ha insistido en que sigamos con los preparativos de la boda y solo faltan tres semanas para el gran día. Miro las invitaciones y sonrío llena de emoción. Están hermosas, es un sueño que pueda casarme después de todo.

— ¿Estás bien? — Pregunta mamá mirando unas revistas

— No, me duele que papá no quiera hablarme. Le dije que habláramos, también le pedí que me entregara en la boda y no quiso.

— Mikhail cuando se enoja o cuando lo hieren, es difícil que sane las heridas tan fácilmente por todo lo que ha pasado en su vida. Pero hay algo de lo que estoy segura, te ama y eso nunca va a cambiar. Ya deja de pensar cosas tristes, ahora piensa solo en tu boda, en Aarón y en tus hijos.

Sonriendo intento hacer eso que ella sugiere aunque la espinita del rechazo de papá me sigue molestando.

— ¿Podría pedirte un favor? Mañana Aarón cumple años y pensaba hacer cosas que normalmente una mujer no hace con los hombres.

— ¿A que te refieres?

Aprieto los dientes algo nerviosa

— Pues algo así como cambiar roles. Quiero llevarlo a cenar, regalarle flores con chocolates y pasar una noche agradable. El logro que mi cumpleaños fuera inolvidable, quiero hacer lo mismo con él. —Mamá se ríe y no entiendo que es lo que le da tanta risa. Pareciera que hasta se burla — ¿Por que te ríes?

— Me resulta gracioso recordar…, hice algo parecido con tu padre hace veinte años. Le mandé flores a la farmacéutica. Se enojó…, bueno más que enojarse le dio pena que le haya regalado flores.

— ¿Podrías cuidar a Noah y a Camila una noche? No quiero dejarlos con ninguna nana ni nada por el estilo.

Dice que si con la cabeza

— Yo los cuido. Ustedes vayan y disfruten — me guiña el ojo con picardía — estrenen ese corazón que ahora no hay escusas.

Mamá no se guarda ni una, habla de sexo como si hablara de una ida al súpermercado. Quiero impresionarlo, quiero hacer algo que le guste pero ni siquiera se por donde empezar y mañana es su cumpleaños. Mamá se lleva a Noah y a Camila con ella. Dejo las invitaciones a un lado y salgo al centro comercial antes de que Aarón regrese a la casa buscando entre tantas tiendas algo bonito que ponerme mañana para la ocasión. Caminó entre decenas de personas mirando escaparates de tiendas y aún nada me llama la atención. Suena mi móvil y veo un mensaje de Aarón

Aaron a las 7:40pm

¿Estás bien cariño? No he sabido de ti en todo el día

Lara a las 7:42pm

Si, estoy bien. Disculpa es que mamá me ocupó todo el día con los preparativos de la boda.

Aaron a las 7:49 pm  

Ansio el que seas mi mujer

Lara a las 7:50pm

Ya lo soy, te amo

Aaron a las 7:54pm

Te amo más mi amor. ¿Sabes qué día es mañana?

Lara a las 8:00pm