Capítulo 1

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-que debemos hacer? Esto no se puede seguir ignorando -dijo uno de los cuatro reunidos.

-En efecto, pero no podemos hablar o se vendrá a bajo por lo que hemos luchado. -dijo el segundo

-Hicimos y callamos todo lo necesario para lograr llegar hasta donde estamos ahora! Opino mandar a matar a este dolor de cabeza -dijo otro.

Tres de los presentes hablaban de como matar a aquel que en los últimos meses había estado urgando en los expedientes más viejos del reino.

-No piensas hablar Makarov? -hablo el primero.

El mencionado alzó la mirada a los presentes y con un suspiro cansado y callo a los otros para hablar.

-Quien quiera que sea éste individuo... tiene motivos y justas razones para hacer lo que hace -dijo firme. -no tenemos porque ofendernos por sus recientes actos Greggory.

-Piensas perderlo todo cuando él lo revele ?! -grito molesto.

-Será una pequeña parte que podré pagar de mis pecados.

Los tres miraron con gran disgusto a Makarov que parecía cansado y atormentado.

-No tardará en averiguar nuestro paradero y entonces nos matará!

De pronto se abrió la puerta de aquella gran sala de mármol y entro un mayordomo con un carrito con un gran juego de té inglés .

-Buenas noches el té esta servido.

Repartió a cada uno las tazas y sirvió. Dejo el carro al fondo de la habitación mientras los presentes bebían.

-Qué haces James? Retírate de una vez - dijo Greggory molesto.

Una gran sonrisa se dibujo en el mayordomo pero no contesto nada. Se giro al carrito y abrió el compartimiento de la parte baja del carrito y sacó algo y con rapidez y se irguió de nuevo.

-Salte de una vez James que no me escuchaste?! -grito de nuevo su amo.

-Es curioso como es que la gente de poder vive confiando de los demás sin dudar de ellos sólo por el hecho de que estos aparecen en la nómina. -respondió el mayordomo sonriente.

-Qué quieres decir? -grito.

-El poder es increíble una vez que lo has probado, es como un adictivo porque una vez que lo has degustado te provoca una dependencia increíble no es así caballeros? -dijo mostrando unas dagas de plata con runas antiguas

-La daga de los Belka -murmuró Greggory  -como es que la obtuviste bastado?!

-Tus encantamiento de protección son una burla, me cuesta pensar que una vez te llamarán  "uno de los magos santos "

-estúpido, soy un mago poderoso voy a-

Greggory trato de levantarse pero cayó a su asiento agotado y mareado.

-Si burle tus sistemas de seguridad y encantamientos protectores que te hace pensar que eres más fuerte que yo? -interrogó divertido  -pero creo que dejaste pasar un pequeño detalle no crees?

-El té -dijo Makarov.

-Este té tiene una droga que debilita al cuerpo, impide que puedan usar su poder mágico. Por ende sólo son viejos inútiles para combate y defensa.

-No nos matarás rápido, tú buscas información y no nos dejarás hasta que la obtengas y no pienso decirte nada sobre las otras 4.

-Makarov cierra la boca!

-me temo decirles que no les voy a preguntar nada caballeros, ya tengo toda la informacion necesaria que podrian ustedes proporcionarme. Pero aun no cuento la mejor parte, el té no sólo los debilita señores es tambien un potente veneno y en minutos más morirán... y no crean que será algo rápido.

[NANOFATE ] La Mentira Qué Nos SeparoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora