Siempre he pensando que la mayor demostración de amor es poner la seguridad y la felicidad de otro sobre la tuya, amor es cuidar al otro y arriesgarte, sin importa el costo, porque al final, el amor es lo mas importarte.
Me fui de París al tiempo de esa pelea, si, estaba en Francia pero no en la capital, Tya me iba a volver loca y en la capital iba a controlarme a su antojo.
Habíamos tenido tantos problemas después de esas discusión, me costaba tener sexo con Tya sin llorar, a ella le costaba no rogarme que volviese con ella.
Habían pasado unos tres meses cuando decidí irme un tiempo.
Me fui bastante lejos. Me encontraba en Marsella, una ciudad al sur.
Cuando mi tiempo de bronceado termino, me coloque la falda suelta que usaba y me coloque el top corto.
Me dirigí a la pizzería y comí una pizza.
Cuando estaba terminando de comer mi teléfono sonó.
La única que sabia donde estaba, porque sabia que no diría nada era Sophie y ella era la que me llamaba.
-Hola, Soph- dije sonriendo.
-¿Como estas nena? ¿Todo esta bien? ¿Te sientes bien? ¿Has comido? -me preguntó preocupada.
-Estoy normal, extraño a Tya, todo está bien, todo aquí es muy tranquilo y estoy almorzando ahora- respondí dándole el reporte -, estuve en la playa un rato.
-Lilly, trata de no salir tanto - dijo bajando la voz -, Milieu ha estado recibiendo amenazas y atentaron ayer contra Marie- me asuste al instante.
Deje la pizza ahí y salí directo al apartamento aun hablando con Sophie.
-Tya esta vuelta loca, teme que algo te pase y ella no pueda evitarlo- me dijo Sophie-, Lilly, se que como siente que te traicionen, pero es necesario que vuelvas, puede pasarte algo y llevas dos meses y medio dando vueltas por todo el país, ya casi es navidad, Ty te necesita, Lilly.
Llegue al bloque y metí todo rápido en una maleta y me puse un pantalón negro y una camiseta junto con mis converse.
Sabia habían estado siguiendo, pero llegue a pensar que era algún guardaespaldas de Tyana.
Tome la pistola que me regalo Tyana y me asome por la ventana y vi a dos tipos fuera.
Las manos me temblaban del susto.
Comencé a pensar cómo salir, a pie me iban a agarrar. Tenia que salir en un auto obligatoriamente.
Había un carro de un señor que yo conocía y siempre dejaba la llave bajo la llanta en el estacionamiento de la zona.
Salí por la ventana trasera, vi a otros dos hombres cuando iba saliendo.
Termine de salir y corrí, sentí sus pasos tras de mi y disparos.
Saque la pistola y le quite el seguro y comencé a disparar.
Una bala me rozo el muslo pero no me atravesó, me subí al auto y arranque, recordando lo poco que me había enseñado Tya.
Cuando llegue a la estación de trenes de Lyon me vende con algo que compre ahí en una farmacia y tenia los nervios a flor de piel.
Sabía que me estaban siguiendo aun, pero me habían perdido de vista o eso creía hasta se me puso una chica en un lado y me saco una pistola.
Saque mi pistola y le disparé en el pie y corrí lejos con rapidez pero tenia dos tipos tras de mi.
Uno me acorraló contra una pared y le di una patada y corrí a un tren que tenía la puerta abierta y estaba por salir.