ELLA ES MI CHICA; CAMREN

CAPÍTULO 18

-POV CAMILA-

-Niña Camila- Interrumpió mi nana-la busca la señorita Collins-entonces, miré detrás de ella y ahí estaba la rubia, con una gran sonrisa en el rostro y  con un ramo rosas entre sus brazos.

-¡Hola, guapa!- saludó acercándose a mí con toda la confianza. Yo estaba realmente sorprendida, me quedé completamente inmóvil.
Yo no sabía que debía hacer ante esta situación incómoda, ¿por qué tenía que llegar justo ahora que estaba apunto de decirle a Lauren que me gusta?.

-Hola ¿Qué haces aquí?- contesté, sin acercarme mucho a la rubia.- gracias nana...- agradecí a mi viejecita; quien sólo me regaló una sonrisa, para después retirarse rumbo a la cocina.

-vine a ver como habías amanecido-sonreía coqueta-toma, traje esto para ti, espero que te gusten-sonrió aún más, dándome el ramo de rosas. Dudé en cogerlas, porque Lauren aún seguia ahí,mirando cada uno de mis movimientos- ¿no te gustan las rosas?-preguntó la rubia.

-uhm..no, prefiero los girasoles o las margaritas...- contesté aceptando las rosas sólo por educación- pero... ¿Gracias?-sonreí casi forzosamente.

-Lo tomaré en cuenta para una próxima ocasión, bebé. La hemos pasado increíble a noche y pensé que tal vez podríamos salir de nuevo-dijo coqueta,guiñandome un ojo.

-uhm...creo qué estoy de más ,me retiro-interrumpió Lauren poniéndose de píe.

-oh...y ¿tú eres?-la observó de pies a cabeza con un gesto de desprecio.

-Soy Lauren Jauregui-contestó con seriedad- con permiso-se dispuso a retirarse, sin antes darme una mirada que me pareció extraña.

-Lauren...-hablé, haciendo que la ojiverde se detuviera - ¿podemos hablar más tarde?- sonreí con la esperanza de que ella me quisiera escuchar.

-Claro, camz- respondió con media sonrisa, antes de seguir caminando en dirección a la cocina.

¡Santo cielo! No pude evitar ver el menear de su trasero. Ese traje de baño color negro le quedaba más que increíble.

-uhm...-carraspeó la rubia- ese traje de baño queda increíble-comentó.

-Definitivamente...-murmuré.Lauren era demasiado preciosa.

-Eres muy sexy- haciendo que volteara  mirarla; ella hablaba de mí.

-oh...uhm...Gracias. Me esperas un momentito, regreso enseguida-dije antes de dirigirme a las escaleras.

-ok...-reía la rubia.

La verdad me sentía un poco incómoda con la mirada de la rubia, así qué sólo pensé en ir darme un cambio de ropa a mi habitación.
No demoré más de cinco minutos, colocandome unos jeans, y una de mis blusas favoritas, para después bajar de nuevo a la sala, pero al hacerlo pude ver a Dinah entrar al salón.

-ugh... ¿hola?- Saludó la polinesia a la rubia.

-Hola-contestó Bárbara.

-¿tú eres?- peguntó mi amiga con seriedad.

-Soy Bárbara Collins, mucho gusto- se acercó a saludar a la chica alta, pero esta la ignoro.
A Dinah parecía no agradarle la chica, así qué supuse que esto sería interesante. Decidí esconderme detrás de una de las columnas, esperando a escuchar mi amiga.

- Como sea-contestó- ¿eres la chica del bar, cierto?- preguntó sentándose en el sofá.

-si- respondió.

-¿Qué quieres con Camila?-fue directo al asunto. A ver cuales eran las intenciones de la rubia conmigo,si pasa la prueba con Dinah,es porque de verdad queria algo conmigo- ¿Qué pretendes con ella?