—¿De verdad lo haremos? —Pregunté algo incrédula.
Fanto y Morfeo me miraron ansiosos.
—Leia solo canta, relájate y hazlo como lo hiciste —Morfeo trató de tranquilizarme tomando mi brazo.
Me preocupa no lograrlo, ser una falsa esperanza... Pero es mejor intentarlo a no hacerlo.
Me senté, respiré profundo, observé como gran parte del planeta estaba sumido en la oscuridad, con la mayoría de las personas durmiendo, el momento perfecto llegó.
Cerré mis ojos, y dejé que todo mi amor bañara a la humanidad con mi voz, no estaba cantando como cualquier profesional, solo como una suave brisa, delicada, soltando gotas de cariño y paz. Me gustaba hacerlo, pronto me relajé y se hizo mucho más fácil, el tiempo parecía irrelevante.
—Leia —tocaron mi hombro y me sorprendí, al girar vi a un Fanto sonriente seguido de un bostezo enorme.
—Creo que lo lograste, mira —Morfeo estaba sentado no muy lejos de mí, dormido, nuevamente— las personas volvieron a tocar el mundo de los sueños y eso fue suficiente para Morfeo, estuvo toda la noche apareciendo ante ellos, y quedó muy exhausto. Yo desperté hace nada, es increíble lo que puedes hacer, y hermoso. ¿No tienes una hermana?
Reí por su absurda broma, y me quedé observando a Morfeo una vez más.
—Oh claro, quieres aprovechar que está dormido, está bien me retiro, no lo dejes embarazado, me fui.
—¡Fanto! —Exclamé justo cuando desapareció.
Me acerqué a él y lo coloqué con cuidado en mi regazo una vez más, estaba muy tranquilo, relajado, respirando con lentitud y calma, me enamoraba verlo así, vulnerable y pacífico, Morfeo está durmiendo y sus sueños son silenciosos, despertarlo sería destruir el más hermoso sueño, él se hizo realidad, sus sueños lo son.

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Oniros
Short StorySegundo libro. Es recomendable leer el primero "Morfeo". Si los sueños se hacen realidad... ¿la realidad puede ser un sueño?