Decidí que no me dejaría vencer, de hecho, lo juro.
Era un lunes por la mañana, salí de casa para tomar camino al trabajo, todo será definitivo.
Al llegar me encontré con mi amiga del trabajo, Lucy.
—¡Hola querida! Llegas temprano, ¿qué te traes? —me saludó animada sosteniendo un café. Adora el café.
Le di un abrazo fuerte por un rato, luego la solté para mirarla fijamente.
—Algo cambiará mi vida, vengo a agradecerte por todo tu apoyo y amistad, sin ti y sin los demás no habría logrado lo que tengo ahora, gracias...
Ella se quedó sin habla y me marché sin dejarla responder, mi siguiente objetivo es mi jefe.
Llegué a su oficina y toqué su puerta para entrar.
—Buenos días Leia, ¿qué tal estás? —me recibió desde su asiento.
—Ehm, vengo a entregarle mi carta de renuncia, emprenderé un viaje que no me dejará asistir y prefiero retirarme antes de decepcionarlos.
—Oh vaya, Leia sabes que nunca nos podrías decepcionar, tu rendimiento y trabajo es excepcional, lamento entonces que tengas que retirarte. Pronto te estaremos entregando tu cheque, gracias por haber colaborado con nosotros —se levantó de su asiento para darme un abrazo.
—Gracias a usted por la oportunidad, me retiro —sonreí, y di media vuelta para salir para siempre de un lugar que me brindó tanto, casi me ataca la tristeza, pero recordé mi promesa.

ESTÁS LEYENDO
Oniros
Short StorySegundo libro. Es recomendable leer el primero "Morfeo". Si los sueños se hacen realidad... ¿la realidad puede ser un sueño?