No Huyas al amor...

Capítulo 23

Pov Jhon

El camino a casa fue rápido y en un cómodo silencio. Cuando llegamos, Emma fue directo a la ducha. Mientras, yo ponía en el microondas la comida que la señora Stwart nos había dejado mas temprano. Pongo la mesa para dos y cuando la comida esta lista la llevo allí. Luego voy a la habitación por Emma, pero no ha salido del baño. Me descalzo y quito mi camisa, voy a la cómoda por una camiseta y una suave voz me hace voltear.

—¿Me prestas una?. —Sonrio y luego me torno serio al ver una diminuta toalla cubrir su cuerpo, su pelo mojado esta recogido en un moño alto y el mismo gotea alrededor de su cuello, de su pecho y muero, por secar cada gota.

—Por supuesto. —me volteo y le paso su favorita, una gris con mis iníciales en letras negras. Me sonríe y luego deja caer la toalla sin ningún tipo de remordimiento, sus pechos están hermosos y solo una pequeña braga cubre su sexo, me guiña un ojo con picardía, luego se pone la camiseta encima. Parece que el agua caliente, se llevo todo el cansancio, porque de la Emma que recogí en el hospital hace media hora, no queda nada. —¿Vamos a cenar?. —ella niega y camina hacia mi deteniéndose a solo centímetros de mi. —¿Que quieres? —pregunto con voz ronca.

—A ti, Jhon. Solo a ti...

Nuestros cuerpos todavía se estremecen por lo que acaba de suceder. Es increíble, como una mirada, una palabra o una simple caricia , puede convertirse en una chispa y encenderlo todo. La entrega de nuestros cuerpos es única y cada vez me resulta mas especial hacerla mía, que mis brazos la sostengan, que mi nombre sea pronunciado por sus labios, mientas le proporciono el más intenso placer. Pero lo mas importante es escucharla jadear un Te Amo, el mismo sale de si alma y llena la mía de felicidad y dicha.

En Emma encontré todo lo que buscaba, para establecerme, para darle a mi vida un rumbo diferente y sé, que solo es cuestión de tiempo para que ella acepte emprender este viaje conmigo agarrados de la mano y quien sabe si en el camino alguien mas se nos une en el viaje.

Beso su cabeza que descansa sobre mi pecho, acaricio su pelo de manera aspiro el olor de su shampoo y sonrió al recordar que ella hizo lo mismo con mi sobrina recién nacida mientras la tenia en sus brazos, el  anhelo de verla en ese faceta, fue tal, que en ese instante deseé que esa bebé fuera nuestra. Por la forma en que miraba a Ximena y como se deja querer de Sammy, sé que sera una excelente madre.

Siento sus manos acariciar mi espalda y un sonido ronco se escapa de mi garganta, cuando su nariz roza mi pecho y aspira mi aroma. Mi miembro que todavía descansa en su lugar preferido, vibra y ella gime bajito. Nos miramos a los ojos y una de sus manos abandona mi espalda, para peinar mi pelo.

—Esperó, que no se nos esfume esto que estamos sintiendo, que el deseo de vernos sea latante, que hablarnos sea prioridad y sentirnos una necesidad. —susurra y besa mi barbilla. — Voy a dedicarme a reinventar cada día lo nuestro, que nuestro amor florezca como rosas en primavera y que tus mirada sea solo para mi.

—Eres todo para mi, eres, mi amor. —beso castamente sus labios y vuelva mirarla. —Eres lo que tanto espere para darle sentido a esta vida, para tener algo que de verdad fuera por y para mi. Tu eres eso y mas, Emma Owen. Te amo, con cada poro de mi piel, eres mi sueño, mi necesidad, mi todo. —sonrie satisfecha, y ella se remueve sobre mi.

La beso, pero esta vez, se siente diferente. Toda la lujuria se ha esfumado dándole paso al amor en su mas tangible expresión, la tomo del buró donde hace unos minutos  la hice mía de una manera carnal y salvaje, solo buscando satisfacción. Ahora, la llevo a nuestra cama y solo que esta vez, le hago el amor de una manera tierna y despacio, me permito disfrutar cada rincón de su cuerpo y hacer de él, mi lugar lugar preferido. Mientras sus gemidos son musica para mis oídos.