No Huyas al amor...

Capitulo 35

Pov Emma

El localizador vibra en mi bolsillo, anunciando que mi siesta vespertina termino y que debo atender una emergencia. Me pongo de pie y entro al pequeño baño del dormitorio que nos acoge en el hospital cuando necesitamos descansar, lavo mi cara y acomodo mi pelo, acaricio mi vientre y sonrió. Este pequeño bultito que esta tomando forma justo ahi, bajo mi ombligo, es mi fuente de inspiración.

—Vamos a trabajar, pequeñito... —susurro y luego me dirijo a la sala de emergencias.

Inmediatamente entro, Nora me informa la condición del paciente. Traumatismo severo por accidente de transito, rotura de extremidad superior derecha y fractura de fémur en tres partes. A nuestro favor tenemos a un paciente consciente y lucido, entro al cubículo y respiro profundo para acostumbrarme al olor a sangre y no salir huyendo con nauseas. Me acerco al paciente y a pesar de su condición me regala una mueca de dolor, la cual interpreto como una sonrisa.

—Buenas tardes, Max. Soy la doctora Owen y me encargare de que te sientas mejor. ¿De acuerdo? —asiente luego de mi presentación.

—Eso seria perfecto. —susurra con voz ronca, se remueve y se queja. Luego veo como de su nariz y boca empieza a brotar sangre. Algo a aparte de lo visinble esta mal.

En estos casos el tiempo es primoldial y mientras nos dirigimos a la sala de imagenes por una radiografia, en quirofano se preparan para recibirlo. El resultado de la radiografía arrojo algo realmente preocupante y mientras Louis ve los resultados un anticoagulante nos ayuda a controlar la hemorragia en su cabeza. Los golpes que Max recibió en la cabeza crearon dos grandes coágulos en su cabeza, los cuales presionan su masa encefálica. Es una desicion dificil pero necesario, es obligatorio retirar los cuagulos y limpiar su cabeza pero se corr el riesgonde que Max no resista la operación.

Explicar lo que sucede y pedirles autorización a sus familiares, es dificil,  mas aun sin darle ninguna garantía  de vida, peor. Pero debemos hacerlo. Su esposa firma la documentación y antes entregarnosla. Dice unas palabra que en estos momentos resultan magicas, mas bien, son una recarga de positivismo.

—Que sea Dios quien guie sus manos en este proceso doctores, para que mi esposo pueda regresar a casa y disfrutar de su epoca favorita con sus princesas. —Pone su mano sobre la mia y me transmite una inmensa calidez.

—Asi sera.  —Le sonrió y voy tras Louis que me pidió que fuera su ayudante en la cirugía.

Según él, soy su preferida.

Seis horas después y complicaciones inesperadas pero finalmente resueltas termina la cirugía. Louis me instruye mientras sutura las insicion superficiales, el tema que nos ha mantenido en contacto las ultimas semanas sale a relucir.

—¿Vas a tomar la beca en la universidad? —Me pregunta. —Ya tu carta esta lista.

—Todavia no se. —Me mira con curiosidad y continua el proceso de sutura. —Estoy embarazada y quiero disfrutar al máximo esta etapa. —Sonrie y las felicitaciones del equipo de médicos que nos acompaña no se hace esperar. Después, Louis continua hablando.

—Te entiendo pero la carrera no dura mucho y puedes hacerlo despacio. Ya tienes mas del cincuenta por ciento adelantado y puedes validar las materias. —Me explica, el realmente quiere que yo haga esto. —No nos prive de tener una excelente cirujana como tú. —Eso me hace sonreir. —No te preocupes yo te voy ayudar.

—Gracias por creer en mi, pero creo que voy a esperar que nazca el bebé.

—Todavia tenemos esperanzas y eso es bueno. —dice y le guiña un ojo al anestesiólogo quien sonrie a las dos.