Así siempre ha sido,
y así siempre será.
Yo me callo, tú te callas.
No, nosotros no somos iguales; no somos como el resto de personas normales.
No discutimos, no peleamos, no gritamos.
No nos insultamos ni decimos palabras hirientes sin pensar.
No. Tenemos nuestra propia forma de hacernos daño.
Nos ignoramos, nos callamos, de todo nos olvidamos.
Tú y yo. Gracias por darme esa pequeña ilusión.
No puedo negar que me gustó el poco tiempo que duró, tantos recuerdos.
Tú y yo. Una fantasía casi irreal. Algo celestial.
Pero no, nunca existió un nosotros.
Sólo tú, yo.
¿Por qué?
Porque así somos.
Tú allá, bien lejos.
Yo acá, echándote de menos.
Amándote en secreto.
Tú, yo. Dos seres tan diferentes y tan iguales.
No existe un nosotros,
no pienses en nosotros.
No importa el nombre que quieras ponerle a nuestra relación.
No importa cómo quieras etiquetarla, ni dónde quieras encasillarla.
No importa. Porque esa relación, no existe.
Y no existe porque nosotros no lo permitimos, nosotros lo prometimos, nosotros lo prohibimos.
La vida es un asco, lo sé.
Pero sólo hay una cosa que puedes hacer y aprender.
Aprende a soportar,
a aguantar.
Aprende a vivir con el dolor. Al igual que yo.
Los malos tiempos no perdurarán. Las personas fuertes sí.
Vive, un día a la vez.
Lucha, una batalla a la vez.
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La vida en Poesías.
PoetryÉsta obra narra y cuenta los dos últimos años de vida del escritor en su peculiar forma de escribir. Se prohíbe cualquier copia completa o parcial. Todos los derechos reservados.
