Me siento en mi asiento
y siento que ya no puedo más.Que debería callar,
hacer lo que dicen, piensan y hacen los demás.¿Para qué seguir?
¿Para qué intentar?
Ya estoy harto de una
y otra vez volver a fallar.
Me siento en mi asiento
y asiento con mi alma
en pena. Y mi esperanza colgando en un hilo de plata, por favor, ¡que todo termine después de este poema!Que se vaya el dolor,
que se vaya el olor a alcohol, y mi pena.Ya no quiero pensar en arrancarme las venas.
Enamorado de la botella, y de la luna llena,
tan bella con su frío resplandor que nunca me deja.La luna ya no le da claridad, ni paz,
ni calma a la noche.Soy yo quien le da obscuridad a la luna.
Después de todo mi felicidad la derroché.Se fue, se fue...
Y jamás la volví a ver.
Y ¡sí!, también es cierto
que me calmé, pedí perdón a las personas que amé aunque tampoco las escuché.Luché, lloré,
me caí y me levanté
otra vez con una pizca más de fe.Pero nada logré.
La verdad, no sé,
vivo sólo por vivir.Yo ya me cansé.
No soy un humano,
soy un orco, triste, feo, estúpido y tonto.Soy un triste títere
sin su titiritero,
tirado, tarado y roto.Escribí, dibujé,
intenté reír, canté.
Y como siempre,
nada conseguí, nada logré, otra vez fallé.Por sólo hacer lo que me gusta me llaman vago,
pero más bien me gustaría ser como un mago para desaparecer.Cumplir el deseo que siempre tuve: el de no nacer.
Ésta no es una carta de despedida, tampoco busco la pena ajena.
Sólo quiero que entiendas que la soledad es mi problema.
La que me altera,
la que me aterra.La que me desespera, y lentamente me desintegra.
Yo, no soy igual
a tus mentores;
no me compares
son sin duda mejores.Pero yo sé el verdadero significado y sentido
de las palabras.Por eso no entenderías
mis depresiones, o que no perdono mis errores
que son montónes.Y me castigan en tantas desveladas largas
y amargas.Mira, por ejemplo
lo intentaré de explicar:Mientras tú
te entristeces dos semanas por no entrar
en tu vestido, o porque tu equipo favorito perdió el partido.Yo, recuerdo para siempre a las personas
que se han ido; a quienes he querido y ya han partido, a todos quienes
he perdido, a los que ya no están conmigo.Compañeros, familiares, amores, amigos.
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La vida en Poesías.
PoésieÉsta obra narra y cuenta los dos últimos años de vida del escritor en su peculiar forma de escribir. Se prohíbe cualquier copia completa o parcial. Todos los derechos reservados.