1° Embarazada de un Narco. © [Completa✔️]

capítulo: 4

             

Capítulo: 4     

Limpie la lagrima que resbalo por mi mejilla con brusquedad por quinta vez antes de ponerme en pie.
—¡mierda! — susurré
Volví a ver la prueba de embarazo solo para volver a ver lo que ya había confirmado hace solo unos minutos.
Estaba Embarazada.
—podías haberte alejado Liz, pero no, tu querías tener sexo con él, estúpida—murmure para mí misma y limpie mis lágrimas, creo que la fiesta de hormonas ya empezó, me estoy haciendo una llorona.
No podía llorar, mi bebé no podía enterarse que lloraba por su existencia.
¿Cómo iré al instituto? ¿Qué le diré a mi mamá?
—¿Liz? ¿Jirafa? ¿Dime seré tía...? — la preocupada voz de Jazmín se escuchó a través de la puerta. Aunque no la estaba viendo, estaba cien por ciento segura que se comía las uñas.
Abrí la puerta para encontrarme a mi amiga prácticamente comiéndose las uñas por los nervios que se carga. Ella ni siquiera estaba embarazada y estaba más nerviosa que yo.
—es... es-toy embarazada—dije ahogada en llanto.

—oh...— se quedó en shock mirandome.
—¿Que voy a hacer!— comencé a llorar como una niña pequeña sin importar que todos estén mirándome.

—shh... Tranquila todo estará bien, todo estará bien—sentí sus brazos rodearme rápidamente.

— No, nada estar bien—solo se el nombre del padre de mi hijo, y solo tengo 17 que voy a hacer, ¿qué le diré a mi madre? — lloré nuevamente.
—ya cumplirás los 18 y no estarás sola yo siempre estaré contigo— me abrazó —esperarme— dijo mientras llamaba a alguien por el teléfono público que tenía la librería.
Salimos de la librería con dirección a su casa y en todo ese trayecto tomo nuevamente el teléfono de su casa y siguió con la charla en la otra línea telefónica.  Se acomodo en el sofá de su habitación mientras discutía con alguien por ese aparato del demonio.

Mientras yo seguía llorando, las imágenes de mi en un futuro no eran tan agradables. Me estaba torturando yo sola. —Liz cariño, sé que estas asustada, pero ponerte de esa manera no ayudara en nada, llame a Ethan no tardara en venir—dijo algo nerviosa.

—¿Ethan? —No conozco a nadie con ese nombre—¿Quién es Ethan? No tenemos amigos con ese nombre Jazmín— Pregunte y ella solo se puso algo roja. La señal estaba clara, ella me oculta algo.
—¿Quién es él? ¿qué es lo que no me has dicho Jazmín? —dije esta vez molesta.
¡Bipolaridad ya llegué!
—...púes no hace mucho acepte ser novia del hermano de Izan y el viene en camino—

— ¡Que! — chillé— Tienes un novio y no me dijiste nada, somos amigas hace años y me mientes—drama aquí voy— sabes que, quédate con tu nuevo novio, yo me voy— dije saliendo por la puerta demasiado molesta.

—¡Ay no, relájate, dios estás sacando todo de contexto Liz!—

—Callate y sal de mi caminó—

—Pero Liz, ¡Espera!—

¿Soy estúpida? Si lo soy...
Caminaba por la calle pensando en que iba hacer, si mi madre se entera me botara de la casa o quizás sus pensamientos sean peores que los míos justamente.
Sigo caminando cuando choco con algo cayendo al piso frío y húmedo.
—cómo lo siento no me fije— digo yo sin levantar la vista sacudiendo la parte sucia de mi ropa que tocó el suelo.
—no, no la culpa fue mía cómo lo siento—escucho que dice, me extiende la mano para ayudarme a pararme, así lo hago, levantó la mirada para encontrarme aún chico con ojos color zafiro y una sonrisa algo placentera.

—¿qué hace una niña tan linda, sola y llorando? — Pregunto fruncido el ceño el completo desconocido.

—no, no es eso me entró basura al ojo— respondo—pero debo irme mi mamá de seguro me está esperando para almorzar.