1° Embarazada de un Narco. © [Completa✔️]

capítulo: 12

            
Capítulo: 12   
     
IZAN

Dos Semanas.
Esas dos semanas en la que Liz no quería saber de mí.  Ella no quería hablarme, ultimadamente estaba más pálida, delgada y no sabía que hacer el doctor dijo que debía que darle tiempo y su espacio, pero me tenía bastante preocupado.
No quería comer, ni siquiera abrir las cortinas o salir a tomar aire fresco. Rechaza las comidas, no duerme bien.

Tiene pesadillas

—¿en qué piensas? —Pregunto Ethan.

—en todo, tengo... miedo...—Respondí mirando la ventana, ellos se habían quedado qui estas dos semanas cuidando la casa entre otras cosas, incluso Jazmín esta toda la tarde con ella, pero no sirve de mucho.

—mira, nadie nunca dijo que sería fácil, sé que es difícil, pero debes—suspiro—no, tienes que hablar con ella, decirle quién eres, como eres, ella debe conocerte, lo de ustedes solo fue sexo no creíste volverla a ver— toco mi hombro con la palma de su mano.

—ahora lo único que los une es su hijo nada más. Se hombrecito habla con ella, y deja en claro las cosas— dice Ethan.

Lo dude
Y mucho

—está bien—acepté, salí de mi oficina rumbo a la habitación, entre sin tocar por suerte ella no puso seguro a la puerta.  La habitación estaba oscura, pero podía ver su menudo cuerpo tendido en la cama abrazando una almohada.  Me quede mirándola un momento mientras quitaba algunos cabellos que tenía en la cara.
El abdomen se le veía un poco más crecido.
Empezó a removerse gruñendo en la cama y salto de un brinco cuando me vio.
—¡No me lastimes por favor...! —La escuché decir, pero luego su expresión del rostro cambio a una triste y miedosa.

—tranquila no te haré daño—dije mientras intentaba tomar su mano, pero ella la alejó, había olvidado todo lo que pasó tenía que estar muy traumada por todo.

—Vine a hablar contigo, no puedes seguir así, responderé todo lo que quieras saber—digo mientras ella clava su vista en mí.

—Es momento de aclarar algunas cosas—dice mientras suspira. Acomodando su cuerpo para estas más cómoda.

—¿Que sucedió? ¿Que querían de mí? — Pregunta con los ojos llorosos.

—Te querían raptar, violar, matar—le respondo suavente.

—¡puedes creerme eso ya lo sé! La pregunta es: ¿por qué? ¿qué tengo que ver en esto yo? ¿mi bebé? ¿que tienes que ver tu con todo? —grita alterada y yo suspiro.

—Liz cuando vivía en el extranjero y desde siempre, yo fui mafioso lideró una de las bandas más peligrosas del país y mundialmente, vivo en ciudades diferentes normalmente por meses o días, nunca estoy en el mismo lugar mucho tiempo—suspiro mirando sus ojos a chocolatadas y como se llenan de lágrimas. Entonces sigo—cuando era pequeño quisieron matarme así que mi madre me oculto, pero no sirvió de mucho mi padre me encontró posteriormente el murió y me quede con todo el negocio, toda la herencia, bueno la verdad es que todo quedó a manos de mi tío pero el me lo sedio a mí—ella me ve sorprendida por lo que acabo de decir.

—¿Quién era tu padre?, No mejor, no me lo digas son muchas sorpresas hasta hoy—

—mira sé que tu vida cambio de la noche a la mañana y siento mucho eso—tome su mano fría juntándola con la mía—no fue por malo que te dije que te sacaras al feto, es porque al saber de su existencia tu vida correrá peligro siempre—acaricie sus mejillas— y no podré protegerte siempre, por eso cuando el bebé nazca   déjamelo, tú puedes irte si quieres. Jamás permitiré que le hagan daño—digo y ella me da una bofetada que puedo asegurar que se escuchó por toda la casa.