Far away /Teen Wolf

yo siempre seré mejor que tú.

Terra dejó de escuchar a Matt cuando escuchó unos latidos cardiacos erráticos provenientes de los vestidores de los chicos. Sin decirle nada más, lo dejó parado ahí y entró ahí, solo para darse cuenta de que Jackson y Allison estaban ahí solos.

Su hermano la tenía contra la pared, con solamente una toalla colgando sobre sus caderas. Allison era un desastre tembloroso, pareciendo como si estuviera a punto de llorar. Lo que realmente la perturbó fue la mirada de Jackson, oscura y escalofriante, fría y siniestra. Terra tragó saliva. Ese no era su hermano.

—Ey, idiota —lo llamó Terra, anunciando su presencia con sus tacones sonando contra el piso. Jackson la volteó a ver—. Ja. Volteaste.

Caminando como si lo tuviera todo bajo control, se puso delante de Allison en ademan protector. Ignoró la mirada agradecida que le dedicó Allison. Toda la situación le recordaba a cómo se había sentido cuando su ex novio intentó tocarla en contra de su voluntad la noche en que la había mordido. Sabía lo que era sentirse impotente contra alguien que parecía más poderoso que tú.

Terra le dio la mano a Allison y se la apretó, diciéndole sin palabras que no estaba sola.

—Realmente deberías cuidar tus amistades, Allison —sonrió Jackson, sin humor alguno en su mirada—. No me imagino lo que dirán las personas cuando vean que te juntas con la zorra de mi hermana.

—¿Ese es tu peor insulto? —Bufó Terra—. ¿Llamarme zorra? Como si todos los baños de chicas no dijeran eso ya.

—Estamos cortados por el mismo patrón, así que no intentes hacerte la fuerte conmigo. Sé que me tienes miedo.

—No tengo miedo de nada —afirmó.

—Tienes miedo del vacío —musitó Jackson lentamente, mirándola como si quisiera deshacerla —. Es por eso que chicos pasan por tu cama pero ninguno se queda. Ninguno te llena. ¿Cuándo entenderás que tú eres la del maldito problema y que nunca encontrarás a alguien que te quiera? —Jackson se acercó peligrosamente a ambas chicas—. Nuestros padres están muertos, Terra. Te dejaron. Y todos lo harán eventualmente.

Por mucho que Terra intentó proteger a Allison, por un momento se sintió igual de indefensa. No podía hablar. Sus ojos se llenaron de lágrimas y tuvo que morderse la lengua para no gritar.

Jackson sacó sus garras, y alzó el rostro de Terra para que lo viera casi rasguñándola.

—Dijiste que me querías muerto el otro día, ¿recuerdas? Dijiste que debí de haber muerto al igual que nuestros padres —continuó diciendo Jackson—. Bueno, no te puedo culpar. No sabes cuántas veces he querido que no existieras, desde hace años. Todos siempre creían que eras mejor que yo. Siempre hablaban sobre cómo eras perfecta en todo lo que hacías. Pero yo te conozco. Sé que eres débil y patética —hizo una pausa—. Vi cuando te ibas a lanzar del tejado esa noche, y no te detuve porque quería que lo hicieras.

Terra le dio un golpe con la cabeza a Jackson, dejándolo aturdido unos momentos. Luego aprovechó que Jackson seguía atontado, tanto por la sorpresa de que lo hubiera atacado como por la fuerza del golpe.

Procedió entonces a apoyar una mano en su hombro y con la pierna darle una patada en la pierna. Jackson se dobló involuntariamente y Terra aprovechó para empujarlo, haciéndolo caer sobre unos casilleros, causando un gran estruendo.

Se acercó a Jackson, con los ojos azules y las garras en alto y tomándolo del cuello, lo obligó a pararse.

—Te comprendo, ¿sabes? —Susurró Terra a centímetros de su rostro, sus ojos brillando con dolor y rencor—. Yo también sería un patético niño traumado como tú, sabiendo que no importa lo que hagas, yo siempre seré mucho mejor que tú.