Meditando

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No es nada,
nada absolutamente que interese,
tan solo son migajas de vino
de cerebro
por los que mi razón florece.

Un eclipse de sombra penetra
por mis ojos mientras pienso,
¡y mi alma se estremece
en su placenta cósmica!


Preñado está el absurdo
de semilla vacía,
muestra la ecografía
que es una idea atómica.

Me han dicho que su padre
padece de locura;
pero no es nada, nada.


Nada absolutamente que interese,
tan solo son migajas de vino
de cerebro que me embriagan,
me hacen perder el juicio
y me torturan.

Hilos de vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora