7. Era un omega destrozado.- L.S /Omegaverse-(Terminada)

Nueve.

Louis miraba al hermoso alfa ojiverde, a quién tenía delante sin aún creérselo.

...-¿Te han tratado bien?, ¿Necesitas algo?-preguntó preocupado Harry.

-¿Qué es este lugar?, ¿Aquí es dónde escondes a todos tus compras?-preguntó el ojiazul levantándose de la cama.

Este no contestó pues no dejó de contemplarlo embobado, mientras caminaba hasta el baño, meneando sus caderas.

-¡Hey!...¿me oyes?, ¡Hooolaaa!- exclamó Louis desde la puerta del servicio, mientras movía su mano de un lado a otro, delate del alfa pues se había quedado perdido en sus propios pensamientos.

-Si...emm...¿qué?...dime...pre-precioso...¿Qué dijiste?-habló Harry al fin.

-Te preguntaba, ¿Que qué va a pasar conmigo, ¿No vas a soltarme verdad.

El omega miró entristecido el alfa en cuanto este negó con la cabeza

-¿Ya nunca podré regresar?- volvió a preguntar este mientras volvía para sentarse en la cama.

El ojiverde entonces se giró y le sonrió volviendo a negar.

-¿Para que me compraste?, ¿vas a tenerme oculto y encerrado aquí por siempre?.

Harry bajó la cabeza.

-Me temo que si Louis, de verdad lo siento pero mi padre nunca puede saber que lo desobedecí... No puede saber que yo te compré y que estás aquí....Si te dejo ir a mi me dejaría sin trabajo y sin apellido pero a ti seguro que te mataría.

-¿Y por qué te has arriesgado por mí?, no me conoces, ni siquiera sabes si valgo lo que has pagado- Louis miró sus mamos.

Harry se levantó del borde de la cama y tras acercarsele, lo cogió de la barbilla suavemente, la levantó para que este lo mirase a los ojos.

-Por ti estaba dispuesto a arruinarme pequeño... sé que eres tú, ¿Acado tú sientes lo mismo?.

El omega asintió y sus ojos se humedecieron.

-Desde el primer momento en que te vi en aquel horrible lugar, lo sentí pero estaba muerto de miedo y por eso me escape... No quería que Natan me violase, yo te buscaba a ti y tú me encontraste.

-Shsss... ya pasó, tranquilo...nunca permitiré que nadie te lastime, ¿de acuerdo?- susurró el alfa acariciando la mejilla del omega para secar las lágrimas que empezaban a brotar.

Louis entonces caminó hasta la cama donde se tumbó seguido del alfa, entonces se acercó más y le dejó un beso en su mejilla, dejando a este perplejo.

—Ya no tengo miedo, Harry, gracias por hacer esto por mi.

El aroma tan varonil y atrayente, hizo que finalmente Louis no pudiera resistirse las ganas de abrazarlo, a lo que este respondió con gusto y aspiró el dulce aroma de su pelo revuelto.

De repente, una fuerza se apoderó de los dos y sin casi percatarse de lo que les sucedía, se encontraron besándose tiernamente.

—Oh joder, eres tan hermoso, te deso tanto pequeño.

El omega sonrió moviendo más rápido sus espesas pestañas.

—No sé porqué me siento así pero quiero estar siempre contigo.

Los tímidos primeros besos se convirtieron poco después en profundos y sedientos, seguidos de lascivos mordiscos y lamentones de placer.

La ropa voló por los aires, ya que desearon con fervor sentir la piel del otro.

-No puedo controlar esto que siento, Louis, tengo que poseerte ahora-gruñó el alfa ardiendo de deseo y cubriendo al omega con sus enormes músculos.

-Si Harry hazlo... quiero sentirte también...por favor, quiero ser tuyo

El alfa no necesitó más, así que con su mirada totalmente oscurecida, abrió las piernas del omega y absorto lo miró con lascivia.

—Mío...mío

Tras comprobar que el omega estaba suficientemente lubricado, probablemente porque también sentía un gran deseo, éste acercó su polla a la pequeña entrada y comenzó a penetrarlo suavemente.

-¡Ooh si Harry!...¡aaah Dios!... ¡aaah..!, ¡siii... !, ¡siii ...!, ¡más!, ¡más!- gritaba el omega desquiciado por el placer que el alfa le hacía sentir.

-¡Aahh... si pequeño!...¡eres tan dulce!, ¡me vuelves loco, aaah...!-exclamaba Harry extasiado, en cada profunda estocada que le propinaba al ojiazul.

Varios minutos después, Louis sintió su próstata vibrar y acto seguido se corrió sobre su abdomen soltando un gran gemido que hizo contraer su esfínter apretando la dura polla del alfa.

El alfa cegado ya por el frenesí que le provocaba cada espasmo del omega, sintió su nudo hincharse y sus colmillos crecer, así que sin casi dar tregua al adolorido ojiazul, olisqueó y lamió su delicado cuello y acto seguido clavó sus fauces mientras derramaba su semilla.

Cuando terminó de morder, el alfa volvió a lamer la herida y salió del interior del omega, el cual suspiró sin dejar de respirar agitadamente.

-Lo siento Louis, sé que es doloroso pero no pude resistirme a marcarte. Como te dije quiero que seas solo mío y ser tuyo para siempre-dijo el alfa dejándose caer en el colchón.

El omega sonrió entre lágrimas y a continuación se abrazó al pecho del alfa.

-No me importa el dolor, siento en mi interior que esto tenía que ocurrir y ha sido lo más hermoso que me ha ocurrido en la vida...Siento que ya te amo y que es para siempre.

-Yo también te amo, pequeño...Algo mágico se había cumplido entre nosotros....Tienes razón, cuando hay amor y has encontrado a tu destinado para que esperar.

......

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