Capítulo 6

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- ¿Ahora sí qué?, Eddy, déjate de estupideces y déjame ir.

- No.

- ¿Qué?, ¿Por qué?.

- Es lo que te mereces por estar con el idiota de Manuel.

- No hay ningún problema, yo soy libre de hacer lo que se me pegue en gana.

- Claro que no. Yo estoy contigo.

- ¿Bromeas? Tú y yo no somos nada. No me has hablado en una semana, ¿Cómo puedes reclamar algo que no es tuyo?

- ¿Enserio no somos nada?

- Nos besamos. Sí. Pero me quedo claro cuando dijiste que no querías que nadie supiera que te gusto, que no querías nada conmigo.

- ¿Y quién dijo que no quería nada contigo?

No conteste y así nos mantuvimos por un par de minutos.

- ¿Me puedo ir?.- Le pido rompiendo el silencio y de mal gana.

- Aún no.

- ¿Para qué me trajiste aquí? ¿Qué quieres para dejarme ir?

- ¿Quieres irte?, bien, pero primero contestame una pregunta.

- Bien, ¿cuál es la pregunta?

Y en ese momento Eddy hizo que la cortina negra que estaba detrás de él cayera.

Lo que veía era increíble, impresionante.

Habían globos de colores y letras en grande con un mensaje, una pregunta: "¿Quieres ser mi novio?".

- ¿Qué es esto?.- Le pregunto sorprendido.

- Sé que no tenía derecho de reclamarte algo, no somos nada. Pero estos días que no he estado contigo, que no he besado tus labios, y te he visto con alguien más... me he dado cuenta que te necesito, te quiero. ¿Qué dices? ¿Aceptas?

El momento que había esperado meses al fin estaba pasando. Eddy me pedía que anduviéramos. Parecía todo un sueño, pero no, era real, todo era real.

Después de unos momentos me acerque a él y me pude ver reflejado en sus ojos, pude sentir un cosquilleo en mí. Tomé su cara con mis manos y me acerqué. Junté mis labios con los suyos, él abrió la boca y nuestras lenguas comenzaron a jugar, era un beso perfecto.

Me separo de él y comienza a hablar él.

- ¿Eso fue un sí?

- ¿Tú qué crees?

Al escuchar mi respuesta Eddy me cargó y me dió vueltas.

- Basta que me voy a vomitar.- Le dije bastante mareado.

Paró de darme vueltas y me volvió a besar.

- Bueno... tengo una pregunta.- Le digo después de terminar el beso.- Si no quieres que nadie se entere que te gusto... ¿por qué venías acompañado en el auto?

- Ah, son personas que no me conocen, las conocí hace unos días, les conté lo que quería hacer y les dije que una amiga te había hecho la sorpresa y aceptaron ayudarme.

- Vaya, si sí eres listo, que te haces es diferente.

- Perdón, ¿qué dijiste?

- No, nada mi amor.- Le conteste con ganas de reírme

- Bien que te escuche, pero te perdono porque se escuchó muy bien que digas "mi amor".

- Ah, sí, ¿y cómo se escucha en tu hermosa voz?

- ¿Qué cosa mi amor?

- ¿Cómo dijiste?

- Amor.

Eso se escuchaba muy bien para mi, en su voz, era tan fantastico, me provocaba un cosquilleo, un bienestar.

- Sabes que si me ofrecieran un auto ó escuchar en tu voz "mi amor" mil veces, siempre escogería tu voz?, A ti.- Le digo un poco cariñoso, viéndolo a los ojos.

- Aunque si ese fuera mi caso, pensándolo bien... yo sí me quedaba con el auto.- Dice pensador.

- ¡Ah!, ¡Sí!, pues entonces quédate con tu auto.- Le digo antes de tratar irme, digo tratar porque me detuvo del brazo.

- Sí, un auto, para así perdernos en el fin de mundo, tú y yo.

- Yo sólo necesito de ti para estar en el infinito.

Y junta sus labios con los míos, sus dulces labios.

- Bueno, vamos que debes llegar a tu casa.- Dice Eddy separandome de él.

- Mi mamá llega después de las cinco de su trabajo, todavía tenemos tiempo.

- Bien... Te parece si caminamos un rato.

- Me parece perfecto.

Y salimos de ahí, y tomamos el camino para tomar mi transporte.

Eran como las cuatro de la tarde y ya estaba un poco nublado y con poco sol. Realmente el sol ya se estaba metiendo, siempre he pensado que los estados de el cielo y nubes son una de las cosas más hermosas de el mundo, el ver un atardecer, un día nublado, con lluvia, un arcoiris, las estrellas, el sol, etcétera. Y justamente en este momento el cielo estaba increíble.

El cielo, Eddy y yo. No necesitaba más.

Esperen. Me doy cuenta de algo.
Eddy toma mi mano.

- Eddy estamos en público.- Le digo viéndolo a la cara y sorprendido.

- Sí, ¿qué tiene?

- Creí que no querias que nadie se enterara de que...

- Escucha.- Me dice interrumpiendo.- Me he dado cuenta que mi felicidad no depende de otras personas. Si me fijo en lo que dicen los demás nunca haré lo que me gusta. Nada más importa si estás tú.

Esas palabras me llenaron de felicidad, de orgullo. El cielo, Eddy tomándome de la mano y yo. Mucho mejor.

Llegamos a la parada y me despedí de Fredy con un beso. Corto ya que el transporte se acercaba.

- Te amo.- Me dice cuando le hago la parada a el transporte.

- Te quiero mucho.- Le contesto.

Me subo a el transporte y me dirijo a mi casa.

Me pongo los audífonos en el transporte y me pongo a escuchar "Eclipse de Luna" de mi ídola Maite Perroni.

Cómo se pinta un cuarto vacío
Cómo se vuelve una noche hacia atrás
Y cómo se dice sin decir palabras, que cuando te miro no sé como hablar

Dime cómo se atrapa una nube en el cielo
Cómo se pinta un dibujo en el mar
Cómo sobrevive un otoño sin viento
Cómo existiera la arena sin mar
Cómo se rompen montañas sin tiempo, sin llorar.

Cómo te explíco amor.

Y abrázame (y abrázame)
Y apriétame (y apriétame)
Y bésame y hazme caricias y besos
Y desnúdame (desnúdame)
Y quiéreme (y quiéreme)
Y quédate y regalame un cielo para el atardecer. Y en ti volar, a ti otra vez.

Cómo te olvído amor.

Cómo sería si un día la Luna se enamorara una noche del sol....

¡Hey! ¡Hola! ¿Cómo están?

Aquí de nuevo con otro capítulo que espero y les guste, opiniones y correcciones en los comentarios, déjen sus estrellias (💫).

Hasta Luego....!!

TÚ & YODonde viven las historias. Descúbrelo ahora