Capítulo 48

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Narra Uriel

- Sí ya voy.- Ya estaba listo para jugar el último partido de la liga de fútbol, habíamos ganado los partidos anteriores y había llegado la final.

- Te amo mucho, sé que ganarás mi campeón.- Eddy se despedía de mí antes de que yo entrara a la cancha.

- Muchas gracias, sabes que te amo mucho, en todos mis partidos mi inspiración eres tú.

- En todos mis días mi inspiración eres tú. Te amo.- Termino de decir y camino hacia la salida.

En ese instante recuerdo a Mateo, sé que debo ser fiel hasta con el pensamiento, pero diablos, Mateo era tan ardiente, recuerdo la primera vez que lo vi, me lo quería comer con la mirada, y estuve a punto de hacerlo en mi casa, pero ya tenía novio. Viéndolo desde otro punto de vista, gracias a él conocí a Eddy, en el parque cuando los fuimos por un helado, esa vez que conocí a Eddy no surgió nada morboso en mí, si no una atracción afectiva, desde ese día me había cautivado, eso se lo debo a Mateo, gracias a él lo conocí y yo la última vez que lo vi lo insulté y lo trate de la mierda a pesar de el estado en el que él estaba.

Dicen que no hay que juzgar el camino de alguien hasta estar en sus zapatos.

Seguramente yo habría hecho algo peor en su lugar, es por eso que quiero disculparme con él, algún día, espero verlo de nuevo para pedirle perdón, siempre que hablábamos me trataba bien y es agradable, me dejé llevar por las emociones. Gracias a Eddy ahora ya no soy el mismo de antes, ahora sé lo que vale una relación y la estabilidad, con él soy feliz y no necesito nada más.

Yo no lo buscaba y apareció sin más, me enamoró y ahora no puedo vivir sin él. Pase lo que pase hoy en el partido no me importa si lo tengo a él

- De prisa Uriel.- Me habla el entrenador y termino de llegar con todos.- Muy bien, las posiciones y alineación va a ser la misma, así que sólo resta echarle el doble de ganas, corazón y empeño que es el último partido, así que vamos.

***

Ya estamos en el segundo tiempo, el marcador va 2-2 y quedan un par de minutos en el contador. Debo decir que el equipo contra el que estamos es más difícil de vencer de lo que creí, se ve que están muy bien preparados, pero para ir empatados quiere decir que les estamos dando el mismo grado de dificultad.

El balón pasa a mí y me encuentro a mitad de cancha corro con él esquivando a varios jugadores hasta ir a ¾ de la cancha y para no arriesgarme pateo el balón y justo lo toma alguien de mi equipo, él también corre de varios jugadores que van contra él y esquiva unos que se encuentra en el camino, al llegar a la portería decide pasarme el balón, supongo que ya habían bastantes en su camino y yo estaba casi solo, detengo el balón y estoy a punto de tirar a la portería y todos quedan detenidos y volteo a las gradas donde todos guardan silencio y miro a Eddy, está mirándome y puedo ver en su mirada que confía en mí, que me ama, veo que con sus labios susurra y testifico su Y YO

Narra Eddy

Veo a Uriel salir a la entrada de la cancha para jugar su último partido, confío plenamente en que ganará, es el mejor de su equipo, por ello es el delantero.

***

Me senté en una de las gradas más cercanas para poder ver mejor a Uriel. Y con mi celular en ocasiones tomaba vídeos y fotografías de él jugando.

Pero al tomar una recordé lo buen fotógrafo que es Mateo. Él tomaba increíbles fotos, sólo bastaba ver su perfil para ver las maravillosas fotos que subía, bueno, para eso también se necesitaba un buen modelo y Mateo lo es. Miento si digo que no pienso en él a veces, porque en un tiempo llegué a amarlo demasiado, como no había amado a nadie hasta ese momento. Me hizo sentir los más sublimes sentimientos, sus facciones hacían llegar la paz en mí, sólo bastaba estar con él para sentirme estable, en calma. Y un día, sin más, se fue. Sé que como muchos no pude decir todo lo que debía antes de que él partiera, sentí pena, no sé por qué, sólo me quedé callado e inmóvil, como muchos me gustaría volver a verlo para disculparme por no estar en su regreso, cuando más necesitaba a alguien y agradecerle por todo lo que me hizo sentir. Ahora sé que no le va mal porque aunque suene raro en ocasiones miro su perfil, veo las increíbles fotos que sube y todos los momentos de su nueva vida, me alegra que en esos momentos captados se vea feliz. Le deseo lo mejor del mundo.

Por otra parte está Uriel, de un día a otro llegó a mi vida y ahora no quiero que salga de ella, es una de las personas que más amo en mi vida, es mi campeón, de juego, de corazón, de vida, con él volví a encontrar la felicidad, con él volví a amar. Cada día que vivo con él es uno mejor. Una vez Charles Chaplin dijo: un día sin reírse es un día perdido, hoy, debo decir, que con Uriel llevo ganados muchos días, porque al menos con ver sus gestos me siento feliz, me siento vivo, tengo todo.

Sólo queda un minuto en el marcador y un compañero de él le pasa el balón, Uriel lo detiene y se prepara para tirar, todo se queda callado, miro al portero y se prepara para detener el balón, voltea a verme y me sonríe, le susurró sutilmente "Tú y Yo", guiña un ojo y me susurra al igual: "todo por y para ti".

Fija la mirada en la portería, después en el balón y tira, todo pertenece en silencio y se escucha como el portero cae en el césped y el balón rebota después de chocar con la red, todos gritan y por conclusión el equipo de Uriel gana con un 3-2.

Todos corren a abrazar a Uriel y entre todos ellos él voltea verme a mí y con sus dos manos suelta un beso hacia mí. Hoy, después de tanto, yo sé, que con él tengo mi TÚ Y YO.

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