En cuanto el ninja médico dictó el alta de los convalecientes, los cinco salieron del hospital. Minato quería hablar con Naruto, pero no sabía cómo. Todavía no creía que fuera padre en unos años, pero estaba alegre. Además, Naruto parecía buena gente y eso lo enorgullecía. Pensaba que lo habían criado bien, al menos él porque no sabía si Kushina seguía viva en la época de Naruto. Cuando vio que Kushina y Sakura hablaban tranquilamente, se decidió a parar a Naruto. Con sólo colocar su mano en el rubio menor, él paró extrañado.
Sasuke los vio y, sabiendo que Minato quería hablar con Naruto, siguió adelante dejándolos solos. Minato le agradeció con la mirada y luego volvió a su hijo. El menor no sabía muy bien qué pasaba cuando lo había parado, pero al ver que Sasuke los dejaba solos, entendió que Minato ya sabía que él era su hijo.
—Naruto...—habló Minato, sorprendiéndolo.
—¿Ya... ya lo sabes?—preguntó Naruto conmocionado.
—Tus compañeros me lo dijeron... Quería saber qué había pasado con Kushina y contigo... Supongo que no tenían ninguna buena excusa para decirme. Yo... no sé qué decir. Soy muy joven para que me digan que tengo un hijo—rió con nervios, pero se sorprendió cuando escuchó la risa del pequeño.
—No pasa nada, 'ttebayo. Háblame como si fuera una persona normal, así será más fácil.
Minato asintió con una sonrisa y comenzaron a caminar para no quedarse muy atrás. Los dos rubios caminaban mientras Naruto le contaba algunas cosas, sin mencionar asuntos que tuvieran que ver con su infancia solitaria o con la ausencia de sus padres. Aunque Minato no quería incomodar el momento, se había dado cuenta de ello tiempo antes. No quería destrozar aquel cálido ambiente que se había formado entre ellos.
Había escuchado cuando Naruto había ido a buscar a Sasuke, a pesar de que el Uchiha no quería. Le había contado de todos los amigos que tenía, sin especificar mucho en los detalles, de todas las cosas que habían hecho e historietas graciosas. Hasta que le dijo que llegó la guerra por culpa de un grupo de criminales.
—¿Y fue allí donde perdiste el brazo?—preguntó el mayor, preocupado.
—Bueno, no exactamente... Es un poco complicado de explicar. Pero la guerra ya había acabado cuando pasó esto, a pesar de ser horas después... Ojalá Sakura pueda encontrar una solución. Es algo difícil comer ramen con una sola mano, 'ttebayo...—bufó Naruto notablemente molesto, a lo que Minato rió un poco.
—¿Sólo te preocupa el ramen?—preguntó, pero antes de poder reaccionar, tanto Naruto como Kushina miraban a Minato con una ceja alzada.
La pelirroja, al ver que los rubios estaban demasiado atrasados, los esperó junto a Sakura y Sasuke. Pero al oír aquella horripilante pregunta, se acercó a Minato con molestia y se colocó al lado de Naruto, alzando una ceja.
—¡El ramen es sagrado, dattebane/dattebayo!—gritaron los dos a la vez, acercándose demasiado a la cara de un asustado Minato.
Minato vio entonces la gran similitud que tenían Kushina y Naruto, y sintió un profundo nudo en el estómago sólo de pensar en la posibilidad de que ella no estuviera viva en la época de Naruto. Intentó olvidar aquellos pensamientos y volvió a la situación, en la que él estaba con ambas palmas arriba, pidiendo perdón con timidez. Al ver a un lado, Sakura reía pero Sasuke había desviado la mirada, dirigiéndola al final de la calle. Minato enfocó un poco la vista y pudo ver a Mikoto e Itachi haciendo los recados.
Entonces supo que él los miraba con nostalgia. ¿Tenía alguna relación con ellos? Si Naruto y Sasuke tenían la misma edad... el rubio era su hijo, perfectamente el pelinegro era hijo de la pareja Uchiha. Decidió presentarlos, aunque fuera con sus nombres falsos.
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LOS VIAJEROS DEL TIEMPO (Viaje al Pasado) #ShippudenAwards
FanfictionDespués de la Cuarta Guerra Mundial Ninja, Naruto, Sasuke y Sakura viajan al pasado. Pero no precisamente a la época de su niñez, sino mucho antes. Entra y descubre esta fantástica aventura. Todos los personajes pertenecen a Masashi Kishimoto, pero...