El desastre entre Missy y Peter.

Capitulo 20: Invitaciónes a una fiesta.

~ MISSY ~

Estaba apunto de entrar a la cafeteria en busca de Archibald cuando en puerta me choqué con Taylor.

Ella tenía su bonito cabello castaño despeinado y estaba llena de libros en sus manos intentando meterlos en su mochila de manera torpe.

—Missy —me saludó—. Perdón, solo intento organizarme un poco.

—Descuida, te ayudo —me ofrecí amablemente.

Ella me entregó un par de libros y unos bolantes. Comencé a mirarlos atentamente, en estos mismos se detallaba que habria una fiesta de disfraces en un lugar que no conocia muy bien. Pero me gusto el bolante, llevaba una bruja y fantasmas, además de que los colores eran llamativos.

—Es para una fiesta en casa de una amiga —explicó Taylor y tomó los libros que estaban en mis manos.

—Me gusta el bolante, está lindo —admití.

—Me enseñó a hacerlos mi hermano, es bastante bueno con las computadoras —dijo y le entregué los bolantes—  ¿Quieres uno? Puedes venir si quieres, Wendy hace buenas fiestas —avisó—. Aunque no siempre terminan muy... bien, te lo advierto.

Ambas entramos a la cafeteria y ella me entregó el bolante. Iba a decir algo pero Archibald apareció de la nada sin siquiera notar que Taylor estaba a mi lado.

—¡Missy! —gritó y se paró a mi lado—. Realmente no creo que...

El sonido de su voz fue disminuyendo hasta que no dijo absolutamente nada y se quedó observando a Taylor. Decidí hablar yo porque esto se estaba comenzando a ver muy raro.

—Taylor él es mi amigo Archie —lo presenté.

Ella sonrió.

—Lo sé, Archibald, él único que sabe lo que vengo a pedir en la cafeteria —dijo con una sonrisa amable y extendió su mano libre—. Hola.

Archie la estrechó aún sin decir nada y no la soltó.

—Necesito mi mano ahora, sino dejaria que la tengas —bromeó Taylor y él apartó su mano avergonzado.

—Lo siento —se disculpó.

Ella se encogió de hombros.

—Descuida —tomó dos bolantes y nos los entregó—. Me gustaría que fueran, será divertido verlos ahí.

—¿Es necesario ir disfrazado? —preguntó Archie ahora más relajado.

—Lo dudo, y si vas sin disfraz no seras el único, yo también detesto los disfraces —respondió animadamente—. Iré a sentarme, pero antes queria saber si...

—¡Archibald! —gritó un señor.

Era alto, tenía barba y cabello rubio despeinado. Él no llevaba la vestimenta de camarero como Archie, sino una simple remera bordo con jeans azules y zapatillas. Aun así eran bastante parecidos, solo que Archie siempre se veía como un tierno niño y él más como un guardia de seguridad musculoso.

—¿Qué pasa ahora, Bob? —preguntó.

—No entiendo lo que papá me mandó a buscar al deposito ¿Me ayudas? —pidió.

—En un segundo —respondió—. Eso iba a decirte Missy, mi papá y mi hermano están aquí, dudo poder hablar hoy.

Se dio la vuelta para mirar a Taylor y le entregó el bolante.

—Me gustaria ir, pero es mañana por la noche y debo quedarme en casa con mi hermano seguramente, deberá ser en otro momento.

Archie sin decir nada más nos abandonó y se fue a ayudar a su hermano.

Taylor se veía decepcionada pero no dijo nada respecto a eso, solo me miró y me ofreció sentarme con ella a hablar un rato si queria, por lo cual acepté.

Alec, el camarero, vino a tomar nuestro pedido y halagó los bolantes de Taylor, aunque ella no lo invitó a la fiesta como hizo con Archie, un indicio de que ella podria estar interesada en él.

—¿Y cómo te fue en tu tarea? —preguntó.

Debía recordar que ella pensaba que yo asistía a la universidad.

—Bien, creo —respondí—. ¿Y tú como vas estudiando medicina?.

—Bueno, es recien mi primer año, creo que bien —se encogió de hombros—. Aunque aun sigo leyendo libros de astronomia y... aveces de vampiros.

Alec volvió con nuestro pedido y luego se retiró.

—¿Tú y Archie son amigos hace mucho? —preguntó.

—Hace un par de meses, lo conocí cuando me mudé a la ciudad, mi hermana trabaja aquí —respondí—. Y descuida, buscaré la manera que vaya a la fiesta de tu amiga.

—Ah, descuida —se encogió de hombros—. No importa mucho.

—Iremos ambos, te lo aseguro —afirmé y bebí de mi café—. ¿Por qué no estudias astronomia en vez de medicina?.

Esa pregunta siempre se encontró en mi cabeza desde que la ví leer aquel libro. Me parecia un poco extraño que una persona leyera libros de este tipo solo por curiosidad.

—Mi mamá tenía el sueño de que estudiara medicina y yo no soy tan cruel como para arruinar tal ilusión, tal vez cuando termine esto pueda estudiar astronomia.

—¿Y seras infeliz durante todos los años que estudies y trabajes de esto mientras tanto? —cuestioné.

—No lo odio, solo... me gusta más otra cosa —admitió—. Es algo exigente conmigo y con Parker, pero más conmigo.

—Eres una chica bonita, encantadora e inteligente, si yo fuera así mi madre daria una gran fiesta para festejarlo —dije provocando hacerla sonreir—. Y noté también que tienes cierto interes en Archibald.

Eso la hizo poner nerviosa ¡Indicio de que todo lo que pensé anterior mente es verdad!.

—No, claro que no solo, solo es agradable, parece el único que tiene interes en las personas que vienen aquí y no solo quiere sacarselas de encima como el resto de los camareros —se encogió de hombros—. Solo eso.

—Harían linda pareja —opiné—. ¿Y que querías decirle antes de que su hermano nos interrumpiera?.

Las mejillas de Taylor se tornaron instantaneamente en color rojo.

—Nada, es un poco ridiculo —dijo más para si misma que para mi—. Queria preguntarle si me acompañaba a la fiesta, es que mis amigas iban a ir con sus novios o chicos que le gustan y yo prometí que iba a llevar a alguien así ellas no me presentaban a nadie y él me parecia el tipo de chico con el que me divertiria solo hablando toda la noche y... me rechazó antes de que pudiera decirle algo.

—¡Aaww! Eres una ternura.

Dios mio... estaba totalmente segura de que ellos terminarian juntos, pero no juntos como novios, aquí me huele a una boda y no descansaré hasta que mis deseos se cumplan.

—No le digas, por favor, es ridiculo —admitio avergonzada—. Sé que son amigos, pero ni una palabra de esto a él, no quiero que se cree una imagen equivocada de mi.

—Él ira a la fiesta, te lo prometo —le aseguré.

Archie vino de la nada con dos cupcakes decorados, entonces recordé la fiesta de Blair y que él le mostraria ideas de decoración a su padre.

—¡Miren lo que hice! —dijo emocionado, miró detras suyo y al no encontrar a nadie se sentó con nosotras—. ¿Creen que a mi padre le gusten? Necesito ese aumento.

—Yo solo pienso en comerlos —murmuré intentando tomar un poco de glaseado con mi dedo, pero el me lo golpeó suavemente—. ¡Archibald!.

—Ni sueñes, los reservaré para ustedes apenas sepa si mi papa me da ese aumento —sonrió y miró a Taylor—. ¿Tu que piensas?.

—Se ven... adorables —admitió.

Pero no estaba segura de si hablaba de los cupcakes o la cara manchada de glaseado de Archie.