Mi Pareja Destinada (EnnoxTana) {Omegaverse}

Capítulo 11

Chikara se fue molesto de la celda, pero también se sentía dolido. Uno de sus temores al encontrar a su destinado era que esté ya tuviera a otra persona, y lo que le había dicho Ryuu lo hirió. Pero trataría de enfocarse en las prioridades. En este momento lo más importante era proteger a ese Omega rebelde y para eso debía concentrarse, por lo que fue a revisar el cuerpo de Soekawa.

-- Chikara, que bien que viniste -- dijo Daichi -- necesito todo lo que puedas obtener antes que se presenten los de Asuntos Internos.

-- Tendremos una suerte si Bokuto se pierde en el camino -- dijo Kiyoko Shimizu, 28 años, Beta, Detective Forense -- y de que Kuroo no se entere aún.

-- ¿Qué fue lo que pasó? -- pregunto Ennoshita mientras se ponía unos guantes para revisar el cuerpo.

Daichi le dijo que cuando llevo a Soekawa a la sala de interrogatorios, lo vio ponerse pálido y luego comenzó a convulsionar cayendo al suelo y arrojando espuma por la boca y que cuando se acercó a revisar los signos vitales, ya estaba muerto. Sospechaban, por los síntomas, que había usado "El dulce guisante", la típica forma que tenían los miembros de La Águila Blanca para no revelar secretos si es que terminaban siendo capturados. Chikara se concentró y transformó su nariz y ojos para percibir mejor las cosas y examino el cadáver.

-- Es como dijiste Daichi -- dijo Chikara quitándose los guantes -- uso "El dulce guisante", y está igual que todos los que hemos capturado de esa organización, limpio.

-- Revisaremos su hogar -- dijo Daichi mientras ordenaba que llevarán el cadáver a donde Tsukishima para la autopista -- vamos a la oficina para hablar de lo que me dijiste.

-- Bien, -- dijo Chikara inquieto -- solo déjame ir de nuevo a darle un vistazo a la celda.

-- Esta con Narita, no debes preocuparte -- pero al ver su rostro -- está bien, solo no tardes.

Chikara no lo pensó ni dos veces cuando ya estaba de camino a la celda. Cuando llego, vio como Ryuu estaba sentado viendo al suelo a una considerada distancia de Narita, eso le agrado, ya que como Alfa, no le gustaba la idea que otro Alfa estuviera cerca de su Omega.

-- Regresaste -- dijo Ryuu sin levantar la vista del piso -- como ves, aún vivo, deja de desprender ese aroma de preocupación.

-- Como no quieres que esté preocupado por ti -- dijo Chikara acercándose a donde estaba Ryuu -- si eres mi Omega.

-- Creo que los dejo un rato solos -- dijo Narita al sentirse sofocado por el aroma de ese par -- huele muy meloso aquí.

-- No Narita -- dijo Chikara al agacharse a la altura de Ryuu -- el jefe me está esperando -- y levantando el rostro de su Omega para verle a los ojos -- solo necesito hacer esto.

Chikara vio en la mirada de Ryuu que el también deseaba esa acción, así que no dudo y estampo sus labios con los del Omega. Empezó como un beso suave, pero poco a poco se empezaron a aferrar el uno al otro y Ennoshita de manera maestra introdujo su lengua en la cavidad de Ryuu, provocando que este gimiera. Narita salió de celda, todo colorado por la escena. Mientras Ryuu y Chikara seguían devorándose el uno al otro. Cuando les falto el aire se separaron.

-- Voy a hacer lo posible -- dijo Chikara tratando de recuperar el aire -- por ayudarte, pero necesito que des toda la información posible.

-- Si -- la mente de Ryuu se sentía como malvavisco, Chikara le hubiera podido pedir que se disfrazara hasta de gatito y él lo hubiera hecho -- mmmm, sabes, deberían arrestarte.

-- ¿Por qué? -- dijo sorprendido.

-- Esa forma de besar es muy peligrosa.

-- ¿En serio? -- y acercándose más a los labios de Ryuu -- y ten por seguro que te haré el amor mejor que cualquier otro con quien hayas estado.

Lo beso de nuevo sin darle tiempo de procesar lo que dijo, pero ahora de una manera aún más intensa, haciendo que empezaran a sentir que la ropa les estorba. No supieron en que momento Chikara acostó en el suelo a Ryuu y él estaba posicionándose entre las piernas del rapado, se sentían en la gloria, hasta que el olor de otro Alfa delato que no estaban solos. Solo así se detuvieron y Chikara empezó a gruñir como advertencia al intruso.

-- Te sugiero que te controles -- dijo Daichi de modo sereno -- no creo que sea bueno que su primera vez sea en el piso de una celda y con la cámara grabándolos.

-- Perdón Daichi -- dijo Chikara regresando a la realidad -- voy enseguida.

-- Por favor, ya no tardes -- dijo Daichi mientras se alejaba de ahí.

Ennoshita miro al Omega en el suelo, él estaba sonrojado y con los labios hinchados, esperando por más, el ya llevaba horas desprendiendo ese dulce olor a Omega. Le encantaba ponerlo así. Pero si quería salvarlo tendría que levantarse en ese momento e ir con su jefe.

-- Me tengo que ir -- dijo con pena Ennoshita.

-- Lo sé -- dijo Ryuu tratando de que no se notará su molestia.

-- No te enojes -- dijo Chikara levantándose y ayudando a su Omega a levantarse -- te prometo que te haré el amor apenas termine el caso.

-- ¿Y quién dijo que yo quiero que eso pasé? -- Ryuu estaba colorado como un jitomate.

-- Me lo dice esto, -- tocándole el miembro a Ryuu sobre la ropa -- me lo dice esto, -- oliéndole en cuello al Omega, haciendo que este ronroneara -- me lo dice esto, -- tomando la mano del Omega y poniéndola sobre su propio miembro, provocando un respingo en Ryuu -- no podrás escapar de mí -- llevo la mano de Ryuu de su miembro a su boca y mordió la parte interna de su muñeca, sangrándola un poco.

-- ¿Por qué me muerdes? -- dijo Ryuu sorprendido y a la vez emocionado por la mordida.

-- Sabes porque, bueno me voy, -- dando un beso fugaz al rapado -- no tardaré amor.

Se fue Chikara a la oficina de Daichi, dejando a Narita de nuevo con Ryuu, el Omega se sentía en las nubes un poco del aroma de Chikara se mezclaba con su olor, esa pequeña mordida de la muñeca era para advertir a otros Alfas que este Omega ya estaba apartado. Le causo gracia los celos de su Alfa, pero se sentía como si fuera lo correcto. Así que se recostó en la banca, quedándose dormido y soñando con unos ojos que lo miraban con amor.

Ennoshita entro a la oficina sin tocar, por lo que se apeno cuando al entrar estaba Koushi sentado en las piernas de su Alfa tarareando una canción de cuna a su abultado vientre.

-- Perdón, no quería interrumpir.

-- No interrumpes Chii-kun -- dijo el Omega sin bajarse de su Alfa -- al bebé le da gusto verte también, brinco cuando oyó tu voz.

-- Va a adorar a su Aniiki -- dijo Daichi.

-- Voy a ser muy viejo para ser su Aniiki.

-- No lo creo -- dijo Daichi con una sonrisa en el rostro, la que tuvo que cambiar para darle malas noticias a Ryuu -- tenemos un gran problema entre manos.

-- No creo que podamos darle un buen trató a tu Omega -- dijo Koushi apenado -- los de arriba están siendo presionados para que haya un culpable por tantos homicidios de Alfas.

Eso no esperaba oír Ennoshita, él había prometido a su Omega ayudarlo.