Capítulo 30

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Pasaron unas dos semanas después de la desaparición de Ryuu y Ennoshita, eran visitados casi diariamente por Takeda que llevaba comida para los dos y le decía de las ultimas noticias en la ciudad. Se había hecho el anuncio que el magnate Tanji Washijoo fue arrestado por secuestro y violaciones a varios omegas, y aun joven alfa que había resultado ser hijo del gobernador Oikawa. De la oficina de gobierno habían arrestado un colaborador del consorcio Shiratorizawa, Satori Tendo, y se expedía la orden de aprensión del nieto del magnate, Tsutomu Goshiki, que aún se encontraba sin ser localizado, así como de varios colaboradores alfas.

Mientras en una casa de seguridad perteneciente a la empresa "Aoba Josai Security", propiedad de Hajime Iwaizumi. Estaba instalados 1 alfa, 1 omega y 1 beta. Esperaban la llegada Tobio y su omega, ya que ese lugar seria donde se ocultarían para su seguridad.

-- Bien Tobio – Decía Iwaizumi mientras ayudaba con las maletas de la joven pareja – aquí estarán seguros hasta el juicio de Washijoo.

-- Gracias Iwaizumi-san – mientras ayudaba a su omega a bajar – no sé cómo pagarte todo esto.

-- Sabes que te quiero como a un hijo – y entrando a la casa ya estaban esperando sus guardias – Tobio te presento a su guardián, Yutaro Kindaichi.

-- Mucho gusto – dijo Yutaro Kindaichi, Alfa, 21 años, primo Iwaizumi – aquí se les cuidara y estarán seguros.

-- Gracias – dijo un desconfiado Tobio ya que Shouyou no toleraba a los alfas – pensé que tendríamos guardias beta.

-- Esa era la idea pero -- hablo un joven omega – creímos que una pareja de alfa y omega ayudaría más a tu compañero – y mirando al pequeño peli naranja que no salía de la espalda de su alfa – hola, pequeñín yo también soy un omega enlazado, me llamo Akira Kunimi, y este cabeza de nabo es mi prometido.

-- Mu-mucho gusto – asomando un poco su cabeza detrás de Tobio – soy Shouyou Hinata.

-- ¿Cabeza de nabo? – dijo ofendido Kindaichi y señalando al tercer tipo – y él es Heisuke Shido, es beta así que no tienes de que preocuparte.

-- Mucho gusto – dijo Heisuke Shido, Beta, 29 años, un joven de cabello castaño medio y gruesas cejas – seremos sus guardianes.

El pequeño peli naranja aun así dudo salir de la espalda de su alfa, ya que aún tenía miedo de todos. Tobio se excusó y subió a su habitación con su pareja. Una vez adentro el peli naranja se despegó y se sentó en la cama.

-- Se ven agradables, -- dijo mirando a su alfa – como quisiera no tener tanto miedo y hablar bien frente a ellos.

-- Lo harás – dijo Tobio mientras revisaba las maletas con la ropa que Oikawa les había comprado – no sé si esto sea de tu estilo pero mi madre te lo compro.

-- Es muy amable – dijo mientras revisaba una playera blanca con girasoles en la espalda – es una flor muy alegre, me gusta mucho.

-- De hecho el girasol me recuerda a ti – dijo sonrojado Tobio.

-- ¿Te parezco un girasol? – dijo sonrojado de pensar que lo comparo con su flor favorita – pero yo no soy así bonito.

-- Tienes razón – viendo el desánimo de su omega – eres aún más bello.

-- ¿Más? – su rostro se ilumino de mayor manera, provocando que su corazón brincara.

-- Mucho más – dijo Tobio acercándose a su omega e hincándose para quedar a la altura de el – sé que nuestro enlazamiento fue forzado, y esta lo del embarazo, pero desde que te conocí he notado como tus ojos se iluminan con una alegría que, a pesar del gran amor de mis padres adoptivos, el saberme aceptado por mi madre biológico, no había visto, y quiero que, esa alegría me la contagies, porque a pesar de lo terrible que paso, tu sonrisa sigue ahí, tu bella – mirando los labios finos y suaves de su omega – sonrisa, tierna, que hace latir mi corazón con solo verla.

-- Tobio...

Días atrás había vuelto a sonreír pero solo lo hacía en presencia de Tobio o Oikawa. El pequeño omega acerco sus labios a los de su alfa, se habían empezado a besar nuevamente mientras estaban en el hospital ya que ese contacto le ayudaba a sentir mejor. Pero esta vez, aunque empezaron a besarse de manera tierna, sus manos comenzaban a juguetear con la ropa de cada uno. Tobio con bastante torpeza se quitó la playera y desabrocho la camisa de su omega. Este se lo permitió, claro no sin sonrojarse desde las orejas hasta el cuello. Su alfa esta deleitado de verlo así solo para él, así que continuo besando sus labios dejándolos ligeramente hinchados. Se recostaron en la cama mirándose frente a frente.

-- Eres tan bello – acariciando la tersa piel de su omega – debo decir que no había conocido a alguien tan bello.

-- Si sigues diciendo eso – soltando una ligera risa – me lo voy a creer.

-- Deberías de creerlo – dijo mientras se acercaba a su cuello y aspiraba el aroma de el – tu aroma huele como a naranjas.

-- Sera que como muchas – dijo imitando a su acción – hueles a café para mí.

-- Tengo un conflicto – lo miro de forma seria -- ¿crees que puedas ayudarme con eso?

-- ¿Cuál es? – lo miro con preocupación.

-- Quiero continuar besándote, acariciándote, -- y mordiéndose los labios – quiero hacerte mío otra vez, pero tengo miedo que cuando lo haga, recuerdes cosas malas.

-- No te lo niego, – acariciando las manos de Tobio – me da miedo, pero si eres tu estoy seguro que sabrás ayudarme a... darme cuenta que eres tu quien está conmigo y no...

-- Lo haremos con las luces prendidas, – jalo sus manos a su rostro – te estaré hablando todo el tiempo para que sepas que soy yo, hare que no te acuerdes de eso.

-- Gracias, yo...

Tocaron la puerta en ese momento y dejaron su plática para la noche, ya que la hora les indicaba que era la hora de comer. En la puerta estaba Kunimi para preguntar si querían comer solos o con ellos. Tobio apoyo su mano en el hombro de Shouyou y este se sintió con fuerza para convivir con más personas así que accedió a comer con los demás, bajando los tres al comedor. Eso alegraba a su alfa, saber que su compañero se sentía más alegre. Aunque algo aun molestaba la conciencia de Tobio. Él había decidido sin consultar con Hinata que no testificaría el omega cuando aprendieran y juzgaran a Goshiki, porque no quería que su pareja sufriera de nuevo.

La prueba de embarazo había salido positiva. Ambos eran jóvenes y un hijo a esa edad sería un poco difícil para ellos, pero sabía que el verdadero miedo de Shouyou sobre eso no era el embarazo, si no la posibilidad de que el hijo fuera del maldito que abuso de él. Ambos hablaban muy poco del tema. A él también le molestaba la duda, sabía que sea quien sea el padre, el amaría a ese cachorro pero ahora más que nunca entendió la situación de su madre Tooru con respecto a él, pero él estaría para apoyar a su pequeña bola naranja. La voz de su omega lo regreso al comedor se dispuso a no pensar en cosas negativas.

Mi Pareja Destinada (EnnoxTana) {Omegaverse}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora