8

1.3K 80 3
                                    

Temprano. La palabra menos indicada para describir el momento exacto en el que me encontraba. Se suponía que mi hermana mayor, René, nos había invitado a un desayuno pero creo que llegaría al almuerzo. Mientras me esforzaba en colocar mis tacones y abrochar mis botones de mi blusa salía corriendo del hotel...

Pero mi sorpresa fue cuando enfrente del hotel se encontraba el coche alquilado por el mismo Rupert, me observó de pies a cabeza. Me estremecí y sin esperar a que dijera algo o incluso a que yo hablara me subí sobre el Audi azul...

- pareces una muñeca diabólica- indicó Rupert con una mueca, yo gire mis ojos y bufé...

- no Rupert, fíjate que no me había fijado- dije con una sonrisa falsa -pero antes de llegar estaciónate a unas cuadras quieres, necesito terminar con mi look- indique mientras peinaba mi cabello ondulado y revoltoso...

- okey- dijo con seriedad y sin más estacionó en una esquina, mientras él se concentraba en que nadie nos viera o incluso nos expulsar, yo me encargaba de arreglarme decentemente...

Iba con una falda blanca de bordado y de un corte pequeño en frente y largo de atrás; un top celeste claro sin tirantes, mi cabello suelto y algo peinado, mi collar, unas plataformas en forma de sandalias. Mis ojos estaba con una sombra negra debajo y coloqué maquillaje, un delineador oscuro decoraba mis ojos y un color rojizo mis mejillas...

- ahora pareces una niña falsa- murmuró colocándose sus lentes para el sol..

- tus comentarios me saben a mantequilla, ¿sabe Si?- dije siendo mi última mirada al espejo, Rupert voltio a verme con su ceño fruncido...

- a mantequilla?- pregunto dudoso y confundido...

- si. Ya que se me resbalan- indique y antes de que me contestara salí del auto camino al restaurante. Rupert venía detrás mío con aires muy enojados y se notaba la tensión pero solo me quedaba ignorarlo y ya, total ni que fuese mi novio para aguantarlo...

Al llegar Becca me esperaba afuera y cuando me vio me sonrió. Le devolví la sonrisa pero me asombró verla al lado de un hombre quizá unos cuantos mayor que ella y muy pegados y ella se sonrojó. Rupert se les acercó y los saludo como si fuese él el invitado...

Al parecer mi hermana mediana tenía un viaje importante hacia Noruega junto con su jefe aunque viéndolos mejor dudo que sean simplemente jefe y empleada. Así que esa parejita se fue primero y para mí mala suerte la mayor parte de la mañana la pase ante raras y malas miradas como siempre de parte de la familia de mamá...

- Asia, hija mía- anunció mamá abrazándome, la abrace tan fuerte como pude -pensé que no vendrías ¿cómo estás pequeña?- anunció con una sonrisa que en años vi y eso tenía un significado. Era feliz y eso hasta cierto punto me complació...

- mamá, muy bien y veo que tú andas mejorada- indique con una sonrisa -y René no se ha aparecido en todo el desayuno, ¿estará bien?- pregunté frunciendo mi ceño, mamá suspiro y asintió...

- si, aunque ya sabes que es tan controladora que...- no termino la frase y eso me indicó que el matrimonio no iba tan fuerte como publicaba mi hermana -peor por cierto, ¿quién es el muchacho con quién has venido?- pregunto observando a Rupert. Voltee a verlo y él se encontraba hablando con algunas primas o más bien sobrinas de mamá...

- pues...es mi CEO, ya sabes la vida que llevo tiene ciertas...peticiones- dije incomoda -por cierto, como René no vendrá supongo que saldré primero, te veré luego en la fiesta de la tarde- indique, mamá asintió y se despidió con un último abrazo...

Fuerte parecía concentrarse mejor en coquetear y no quería que pareciese que nosotros tuviésemos una relación más allá que de conocidos, así que sin más decidí salir yo sola de ese lugar. Camine por las calles algo tranquilas para la hora en la que me encontraba...

Después de unos minutos entre dentro de un comercial cercano, camine y busque especialidades para crear nuevos atuendos. Conseguí un grandioso sombrero de palma, un vestido que se podría recomponer, unos zapatos y unos pantalones de lona...

Mientras miraba detenidamente una linda tela que la podría reutilizar quizá para una cortina, aunque claro siendo la hija de papi seguro que todos pensaran que todo lo que uso es de marca o incluso de el extranjero pero la verdad es que la mayoría de cosas siempre les pongo una marca mía y no se nota ya que todos creen que son diseños únicos o que incluso yo msima diseñó la ropa y la mando a realizar...

- pensé que tenías mejores expectativas- indicó una voz masculina a mis espaldas. Me di la vuelta y me cruce de brazos mientras seguía caminando...

- wow, el sabelotodo ha llegado, ¿quisiera darme su opinión?- pregunté con sarcasmo mientras veía las cosas en las estanterías, con el brazo izquierdo llevaba la canasta con las cosas que llevaría...

- quizá algo de marca. Ya sabes para ti una Señorita Consentida, es lo menos que puedo esperar uno aunque para serte sincero descubrirte en este lugar es...impresionante- anunció haciendo unas cuantas muecas y ademanes con la mano, rodee los ojos...

- no sabes quién soy realmente Rupert y ahora que comienzas a tener confianza solo te puedo aconsejar algo- dije enfrentándolo, Rupert confundido asintió -deja de querer conocerme y no intentes nada, sigue siendo quien tú eres; un gruñon malhumorado y simplemente cumple con lo que sea que tú mismo hayas pedido y déjame...

Señorita Consentida ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora