Señorita Consentida ©

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Asia:

El día en que conocí a Janet fue prácticamente el mejor; sin embargo en la conversación con papá fue la peor. Estaba dispuesto a vender a su hijo y peor todavía: dispuesto a pagar lo que sea para que estableciera un matrimonio con Rupert. Los días pasaron y con ellos las semanas, poco a poco me encontraba más distante de Rupert y cada que lo veía a los ojos veía su dolor y eso me estaba matando...

- dime algo Asia- rogó mientras acariciaba mi espalda, me encontraba con la vista al frente y dejando un poco de espacio entre él y yo -por favor; que te ha estado ocurriendo el día de hoy?- pregunto acercándose a mi...

- Rupert...- murmuré pero depares de tanto mi voz se quebró y las lágrimas comenzaron a salir sin ningún desvío y sin detenerse...

- sé que algo ocurrió en esa junta con tu papá, lo sé porque te conozco Asia. Dime qué ocurrió, prometo hacer lo que sea para que estés mejor- suplico mientras me colocaba en posición para verlo a los ojos...

- no podemos seguir así- dije tomando valor y secando mis lágrimas -es lo mejor para ambos- murmuré evitando su vista...

Ambos nos quedamos en silencio, Rupert me observaba y yo ni siquiera podía verlo a los ojos, intentaba mantenerme firme. Y cuando creí que se iría se subió sobre mí y comenzó a devorar mis labios sin ningún escrúpulo...

Trate de empujarlo pero después de unos segundos termine rendida y siguiéndole el beso. Mis manos se enrollaban en su cabello y mis brazos alrededor de su cuello, mientras Rupert bajaba sus delicados besos por mi cuello. Solté un pequeño gemido pero luego Rupert se detuvo y me observó a los ojos...

- enserio consideras que es lo mejor?- pregunto elevando una ceja -sé que algo sucede y no me iré sin que me digas la verdad- dijo dejando un casto beso sobre mis labios, cerré los ojos y suspire...

- no te convengo; no soy fértil y sé que algún día tendrás ese deseo de querer tener niños. Y porque alguien que tiene como papá a un idiota que hace lo que sea para casar a su hija por conveniencia es peligroso que este junto a ti- dije bajando mi vista, sus dedos acariciaron mi mejilla...

- entiéndeme Asia, yo te quiero aún con todos tus defectos que nombras y me vale lo que tú papá quiera. Aquí importa solamente nuestros sentimientos y nada más. No te dejes llevar por malos deseos, tú eres mía y yo soy completamente tuyo, no cometas locuras Asia, amémonos sin que la gente nos importe- murmuró y antes de que pudiese contestar sus besos se unieron con los míos...

Y entonces decidí arriesgarme. Toda mi vida tuve que seguir la sombra de la "perfecta" familia y por una vez en la vida quería hacer algo distinto, algo diferente y muy ajeno a lo que siempre solía hacer. Pero al final entendí que Rupert tenía razón y lo más importante que estaba dispuesta a arriesgarme costase lo que costase. Porque al final termine siendo su Señorita Consentida...