22

874 65 7
                                    

Por alguna extraña razón; Maggie después de tirar ositos de goma llego a media tarde a indicarme que me colocará un hermoso vestido de color vino y a (literalmente) ordenarme que estuviera lista antes de las ocho y media...

Y así lo hice, ¿irónico no? Me coloqué el vestido que caía en forma de cascada sobre mis muslos hasta dos dedos arriba de mi rodilla, el corte en V se encontraba enfrente y atrás descubría un poco la espalda, era de mangas caídas y convidaba perfecto con unos tacones del mismo color...

- Maggie, que se supone que harem...?- pregunté pero mis palabras quedaron en el aire cuando vi a Rupert enfrente mío, me sonrió y estiró su brazo para que lo tomará, le dediques una mirada confundida pero tome su brazo...

Me guió hasta su auto; el camino fue silencioso y algo tenso de mi parte. Iba imaginando las posibilidades de que fuera tan caballeroso hasta para romper una relación. Aunque cuando llegamos al lugar se me ocurrió todo menos un rompimiento...

Era un campo enorme y decorado con faroles, en el centro se encontraba un camino de velas que guiaba el camino hacia un porche,en donde se encontraba una mesa y dos sillas. Típico cliché, sonreí y voltee a verlo...

- te amo- murmuró y con esas simples palabras se formó una sonrisa en mi rostro y sin pensarlo dos veces me lancé contra sus labios. Segundos después nos separamos por falta de aire -quiero desearte un feliz cumpleaños con esto- murmuró tomándome de la cintura y guiándome hacia el lugar...

Llegamos y nos sentamos; la noche era perfecta y aunque había un poco de aire eso no estropeaba nada de la sorpresa. Hablábamos de muchas cosas y sobre muchas anécdotas mientras sonreíamos y nos dábamos cariño mutuamente...

- muchas gracias Asia, por hacerme ver que siente en cualquier lugar existe esa persona única- murmuró, lo observe con curiosidad -porque cuando papá nos dejó tuve esperanzas cariño, créeme que si las tuve pero luego llegó mi padrastro. Hasta cierta forma se lo agradezco como nunca pero entonces comprendí lo que una infidelidad le hace a un niño inocente. Mamá separo a papá de mí y eso es algo imperdonable- murmuró con sus ojos cristalizados -desde entonces no creo en el amor, decía que siempre te rompía el corazón- murmuró y luego acaricio mi mejilla -pero llegaste tú Asia y cambiaste mi perspectiva hacia el amor- murmuró y antes de que pudiese decir algo me besó, con felicidad y placer, con necesidad...

- yo...agradezco que me contaras más de tu pasado Rupert- murmuró cabizbaja -siento no ser igual durante todo este tiempo. Enserio tratare de ser la mejor y dar lo mejor de mí y tratare de que esto no termine ¿y sabes porque? Porque te amo, te amo con todo mi corazón- murmuré dejando un beso en sus labios -yo también me desilusione cuando era una niña Rupert, a mí también me dejaron a la suerte y no les importó mis sentimientos, también se burlaron porque era la niña buena y la pequeña y la única que no era hija del hombre que mamá amo con todo su corazón y eso dolía, dolía demasiado- murmuré soltando una lagrima que Rupert rápido limpio con su pulgar y con delicadeza -pero...gracias a ti. Descubrí que simplemente fue un mal momento en mi vida y sabes...creo que si en este instante me pidieras matrimonio aceptaría con tanto gusto, que mis promesas se irían a la mierda- sonreí y Rupert sonrió estrechándome contra su peco...

- te amo mi Señorita Consentida- murmuró dejando un beso suave sobre mi cabeza...

Señorita Consentida ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora