Señorita Consentida ©

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Asia:

- buenos días!!!- chillo Maggie entrando al apartamento, bufé y asentí -que sucede?- pregunto frunciendo el ceño mientras cerraba la puerta y dejaba el desayuno sobre la barra de la cocina...

- estoy viendo que puedo hacer para conseguir un vestido a última hora- murmuré, sabía que mi amiga era capaz hasta de torturarme ya que según ella dejar el atuendo a última hora es un crimen de la moda y para qué contradecirla...

- estás loca!!- comenzó sentándose junto a mí para ver los vestidos que veía vía internet, ella negó exageradamente -antes de que te obligue a pararte de ahí y mover tu trastero hacia el auto. ¿A dónde piensas ir con vestido?- pregunto elevando una ceja divertida...

- Hugo vuelve de la ciudad y nos invitaron a la gala, ya sabes una de las más importantes- anuncie restándole importancia, voltee a verla y fruncí mi ceño -acaso no te llego invitación?- pregunté sorprendida ya que los padres de Maggie o mejor dicho el padrastro es uno de los miembros famosos del comité...

- obvio pero pensé que no irías- murmuró incrédula todavía, sonreí y negué...

- papá piensa que es mejor para...ya sabes- solté el aíre decepcionada -ahora me ayudarás o tendré que averiguar dentro de tu closet?- pregunté apagando mi laptop y levantándome, mi amiga sonrió y ambas solíamos camino en busca del "ideal"...

Mientras paseábamos por medio comercial viendo distintos tipos de vestidos y tiendas a Maggie se le ocurrió la gran idea de pasar a ver también zapatos, maquillaje y ropa íntima ya que según ella podía disfrutar de Hugo físicamente aunque obviamente nunca lo haría ni de broma...

Óscar se nos unió tres horas después. Comenzamos a buscar pero nada me convencía y al paso al que íbamos no encontraríamos nada y el tiempo comenzaba a agotarse, pensé que decirle a Hugo que tenía gripe o cólicos para que entendiera mi ausencia pero a mí querido mejor amigo se le ocurrió otra idea mejor...

- vamos a la tienda exclusiva- propuso, Maggie lo observó con alegría mientras yo le mostraba mi rostro con "ni se te ocurra". Pero igual me ignoro -oh vamos Asia, de igual forma es mejor que llegues sexy a que llegues incomoda con un vestido que no te luce- me aconsejó, Maggie concordó y asintió...

- pero saben que odio ir a esa clase de tiendas. Quiero ser normal una vez en mi vida- dije haciendo una mueca -pero...quizá deberíamos ir a ver- dije rindiéndome ya que Maggie parecía muy emocionada...

- igual es mejor que hablen de ti por usar una ropa buena y de marca a que hablen de ti por tu rostro de incomodidad y de ropa de mala calidad- indicó Maggie encogiéndose de hombros, suspire y asentí...

Cuando llegamos a la boutique prestigiada y conocida por la mayoría de personas de la ciudad, ya que los dueños lograron fundar una cadena de boutiques muy famosas y conocidas por ser la que los famosos y de clase alta suelen utilizar. Maggie chillo de alegría al entrar mientras yo simplemente la seguía, la boutique consistía en estar dignidad por: ropa casual, vestidos formales y de fiesta, ropa de verano, ropa de invierno, zapatos, ropa interior, de ambos sexos, y de ultimo maquillaje...

Llegamos a la sección de vestidos formales y de fiesta. Mientras Maggie revisaba ciertos estantes, Óscar se pegaba a mí para darme su opinión. Me probé como diez vestidos pero ninguno me convenció, de pronto cuando iba en busca de mis amigos ya que me había quedado hablando con una trabajadora, me encontré con el CEO Rupert...

- vaya,no esperaba verte por acá- anunció volteándose y pude observar cómo iba vestido con un traje azul y una corbata verde a medio hacer...

- ando de...¿compras?- dije más como pregunta que afirmación...

- ya veo. Era obvio que una Señorita Consentida compraría en una tienda como esta- indicó volviendo a voltearse hacia el espejo, fruncí levemente mi ceño y observe sus ojos a través del espejo -y ya encontraste algo para ti?- pregunto observándome y lo entendía ya que no llevaba ninguna bolsa y mucho menos alguna prenda probada...

- no- murmuré -mis amigos vinieron conmigo pero parece que la tienda los embeleso, mientras que yo aún no consigo nada- indique aunque me sentí rara por contarle a alguien cosas de mi vida, suspire y me acomode para irme -bueno un gusto verte, feliz día- indique pero antes de que pudiera marcharme un agarre me detuvo...

- te ayudaré- afirmó tan convencido que me costó creer que el CEO gruñón haya estado ofreciéndose a ayudarme a mi, la típica chica que creía una Señorita Consentida...