Señorita Consentida ©

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Mientras comía las nueces junto a Becca observábamos como Rupert jugueteaba con William quien no podía dormir sin que su papá lo arropará. Mientras Becca y yo hablábamos de distintas cosas veíamos la hermosa imagen de Rupert como figura paterna de pronto sentí una pequeña molestia.

Becca me contaba sobre el acto misterioso que mamá le quería contar, según ella no era algo normal ya que la citó y pidió que con ella estuviese papá, eso me preocupo ya que no imaginaba el motivo pero conociendo a mamá sería un secreto más que ha estado guardando por años.

Pero lo ignore sin decirle a nadie para que no se preocuparan de más; mientras tanto Janet llegó a visitarnos unos momentos después haciendo que nuestra reunión se agrandará y comenzáramos a hablar de cosas sin sentido, Maggie estaba transportándose para acá ya que acababa de salir de su empresa.

- William deja de molestar a tu tío- indicó Becca algo cansada de repetirle lo mismo al pequeño como por doce veces seguidas, sonreí.

- no te ríes eh- indicó Rupert observándome, era tan gracioso ver cómo el pequeño le jaloneaba su cabello lentamente.

- tranquila, existe el karma y eso vendrá con las mellizas- indicó Becca mientras me observaba burlona.

- claro, veras que sí- dije acomodándome un poco ya que me incomodaba demasiado, comencé a caminar pero seguía sintiendo cierta molestia.

Me disculpe y me dirigí hacia la cocina, me serví un vaso con agua mientras la bebida intentaba calmarme pero esa sensación de malestar me estaba más que incomodando, cuando iba a soltar un quejido apareció Rupert quien me abrazo besando mi frente, le sonreí y me recosté sobre su pecho aún con malestar.

- que sucedió preciosa?- pregunto observándome, negué algo tensa.

- solo...tenía sed- indique con una mueca mínima, pero como era de esperar puerta lo noto de inmediato.

- que sucede?- pregunto preocupado pero cuando estaba a punto de articular algo no me dejo ese dolor inmenso que me azoto de pronto.

Me separe de pronto colocando ambas manos sobre mi vientre y haciendo una mueca grande por el dolor, de pronto sentí como un líquido salía por mis piernas y efectivamente ya se encontraba en el piso. Rupert me observó preocupado mientras yo seguía en choco hasta que otro dolor logró azotarme.

- creo que...estoy...

- vamonos, te llevaré al hospital ahora mismo.

Y sin más me jaló hacia el auto donde Becca se subió junto a William, atrás iba Janet seguida de Maggie que ni siquiera alcanzo a bajarse cuando todos le indicaron que nos siguiera. En el camino Becca comenzó a llamar a mis padres y a René, no me agradaba la idea pero al final era su hermana y comprendía que pensara que tuviésemos la misma relación que con ella.

El dolor era inmenso y me preguntaba si sería capaz de hacerlo. En cuanto me metieron al quirófano me comenzaron a preparar para hacerlo natural, tenía mucho miedo pero la mano de Rupert y su presencia me tranquilizaba demasiado. Puje y puje y el dolor seguía ahí y la preocupación peor.

Mi mente repetía una y otra vez que era para por fin poder ver a esas preciosuras y que las traería al mundo, entonces como si ese hubiese sido el mejor impulso Rupert lo aumento dándome sus palabras de amor y aliento y su beso en mi frente. Mi ritmo aumento tanto que cuando escuche el llanto sonreí por instinto. Ni siquiera pude descansar cuando mi segunda hija ya venía en camino. Nuevamente Rupert me alentó diciendo que todo pasaría y que por fin las tendríamos con nosotros y así fue.

A las 8:43 p.m. Nació la pequeña Alina Monet Weslley Scooltt, y a las 8:55 p.m. Nació la pequeña Arlen Sharon Weslley Scooltt. Ambas nuestros dos tesoros más preciados en nuestras vidas a partir de esa hora en la que las vi por primera vez a ambas, un hechizo llamado amor de madre...