Señorita Consentida ©

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Una semana desde que nació mi hermoso sobrino-ahijado, es una lindura y es bastante grande de lo normal, se nota que Becca se nutrió demasiado bien cuando lo tenía en su vientre. Rupert y yo aceptamos encantos en ser los padrinos del pequeño William quienes tenía más parecido a su familia paterna que materna...

Cuando lo cargamos por primera vez fue muy hermoso el momento; Becca incluso lloro de la alegría y yo no pude evitar sonreír como loca mientras lo cargaba y veía como me dedicaba su primera sonrisa, acto que de inmediato no lo deje pasar y le sonreí tal y como él lo había hecho...

Ahora nos encontrábamos en casa de Becca quien comenzaba a empacar para mudarse a donde mi papá les había conseguido una hermosa y grande mansion. Según Becca quería alejarse un poco de la familia materna y conocer un poco más de la familia de Bryan que justamente se encontraba localizada a una hora de donde yo me encontraba viviendo en el apartamento...

Como siempre a mamá le costó la decisión y René no estaba para nada feliz con que SU hermana se mudará tan cerca mío, aunque yo estaba más que feliz de tener a Becca cerca mío y al pequeño William, sin embargo antes de que Becca diese a luz me enteré que en realidad Bryan la había hecho decidir en irse o quedarse, ya que al parecer él quedó al mando de su imperio, ósea su oficina central ya que su abuelo se había retirado...

- William Emerson deja dormir a mamá- lo regaño Becca mientras nos encontrábamos en la sala principal. Listas para salir al primer vuelo de mañana...

- déjalo, es un ángel- murmuré defendiendo a mi pequeño sobrino, Becca carcajeó burlona mientras el pequeño me observaba -por cierto, Maggie dice que le encantaría organizar todo- indique mientras volteaba a ver a mi mejor amiga quien se concentraba en la carretera, hasta que reaccionó...

- cierto!! Tengo mis contactos y para su bautismo sería genial organizar su fiesta en grande, obvio respetando tus visiones e ideas- indicó encogiéndose de hombros, Becca sonrió agradecida y asintió...

- gracias, sería un honor- indicó, de pronto sentí un mareo y ciertas nauseas al oler el olor de las galletas que René traía, me levante y me dirigí al baño aunque gracias al cielo no vomite...

Cuando regrese el olor seguía molestándome pero no tanto como cuando recién llegaron; Rupert me observó preocupado pero le sonreí en señal de que no se preocupara, cuando Becca intentó comer el lindo William empezó a lloriquear ya que no quería dejar que su linda mamá comiera. Así que intervine y lo cargue entre mis brazos sentándome junto a Rupert...

Mientras lo admiraba y mimaba, el pequeño castaño me observaba atentamente como si entendiera cada una de las palabras que yo le decía, Becca sonreí e incluso nos saco una foto soltando una que otra lágrima. Visualice a Rupert quien me observaba con un cierto destello que no supe descifrar...

- te ves genial como mamá- murmuró erizando mi piel, sonríe nerviosa...

- es increíble que me pase esto a mi, imagínate- indique en un murmullo bajando mi vista al pequeño bebé -es tan hermoso y tierno- indique sonriéndole, Rupert asintió y pasó su brazo alrededor de mi cintura...

- igual que su tía y madrina- indicó dejando un leve beso en mi mejilla, sentí como esta iba tomando color, iba a responder cuando nos interrumpió René...

- no es una lástima- murmuró fingiendo tristeza, fruncimos todos nuestro ceño sin entender -claro, se nota a lenguas que Rupert desearía querer tener hijos- indicó viendo a su hijo -lastima que ella fue la desafortunada que no tiene esa posibilidad- indicó viéndome con algo de burla, me tense y Rupert frunció su ceño...

Maggie fulminó a René mientras Becca le reñía en voz baja, William se removió entre mis brazos y baje mi vista hacia le pequeño para arrullarlo y calmarlo, René simplemente me observaba con burla, con esa misma mirada que siempre solía hacer contra mi, siempre desde que tengo memoria a sido así y no logro entenderlo...

- eso está mal para ti Rupert?- pregunto haciéndose la inocente, la observe con seriedad, cuando estaba a punto de hablar, Rupert se adelantó...

- la verdad es que no, Asia es muy bella como es y aunque tenga eso desafortunadamente como tú lo llamas, para mí no lo es, porque así podremos follar el resto de la vida sin tener que preocuparnos- indicó burlón dejando a una René indignada -además algo me dice que eso no es imposible y si lo deseamos y está escrito vendrá y nos bendecirá, y sino es así pues podremos adoptar, Asia es mi mujer y lo será siempre tenga o no ese tema desafortunado como tú lo llamas- indicó serio, René trago duro y fue salvada por el tono de su teléfono...

Becca se carcajeó y Maggie mordió su labio para no explotar en carcajadas más altas que las de Becca, sonreí y baje mi vista de nuevo al pequeño quien me veía con cierta chispa en sus ojos, le lance un beso en el aire y después le sonreí a Rupert quien dejó un beso sobre mi frente, ese mismo beso que tanto me gusto y que no olvidaría nunca...