Cuando levantas la vista del suelo y lo miras, se te cae el alma a los pies.
Es tan joven.
Hoy parece incluso más joven que ayer.
No te ves capaz de criar un hijo o una hija tú sola. Es demasiada responsabilidad, es imposible que puedas llevar bien esa relación tú sola. Sin embargo, es casi más imposible que Luke se quede a tu lado. Él está viajando cada semana, pasa meses fuera, apenas te llama más de una hora al día en épocas de estrés.
¿Cómo vas a cuidar tú sola a tu hijo?
Oh.
¿Y si son gemelos?
¿O trillizas?
Te mareas y Luke lo nota.
- ¿Qué pasa? ¿Estás bien?
Te tiemblan las manos pero no puedes hacer nada más: le enseñas la prueba de embarazado positiva. Cierras los ojos y suspiras hondo, evitando romper a llorar.
- Estoy embarazada.
No oyes respuesta.
Asustada, abres los ojos y encuentras a Luke en el suelo. Se ha desmayado.
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Por cierto, he hecho una nueva obra de capítulos muy cortitos de fragmentos de conversación de WhatsApp con varios famosos. Sería genial si os pudieseis pasar y leer.
Cuidaos,
Aleave
