Capítulo 33

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Yoongi empezó a besarme en los labios apasionadamente y rápidamente deslizo parte de la pijama de unicornio que tenía puesta. Empezó a soltar pequeños gemidos debido a que su miembro le dolía por la presión del pantalón, yo lo comencé a desabotonar y el suspiro relajado. Tiempo después comenzó a quitarme el resto del traje pero sentimos como la puerta estaba por abrirse, ambos miramos hacia atrás; yo pegue un brinco, agarre mis cosas y me encerré en el baño. Yoongi se quedo dentro de la cama con la sabanas encima de su cuerpo. Yo coloque mi oreja contra la puerta para escuchar la inesperada conversación.

-Yoongi...- dijo una voz chillona entrando a la habitación. -Morishita esta abajo- yo fruncí mi ceño.

-¿Que? ¿Mo-morishita? ¿Hablas de ella...??- dijo Suga tartamudeando, yo voltee mis ojos. Jimin respondió seguramente.

Ambos se fueron del cuarto dejando la puerta cerrada, yo salí al sentir su salida. Empecé a ponerme celosa y enojada, comencé a sudar... Me coloque contra la pared y deje deslizarme hasta caer al frío piso. Decidí hacer un plan, una venganza, algo que los dejara boquiabiertos. Me bañe con uno de los productos mas caros que compran los chicos. Un jabón con olor a vainilla, un champú de miel, acondicionador de canela y una crema especial para el cuerpo. Me coloque un vestido corto de color rojo intenso, con escotes en zonas como la espalda y los pechos. Metí mis cálidos y suaves pies en unos tacones del mismo color que el vestido; me arregle mi cabellera, y me maquille justo como la chica de una revista de moda muy famosa, me felicite a mi misma por el maravilloso trabajo.

Me perfume con una fragancia espectacular y fresca. De inmediato baje las escaleras pero como toda una dama, dando escalón por escalón, pasando mi mano delicadamente por la barandilla y de repente me quedo parada al ver a todos comiendo como unos holgazanes, Yoongi estaba allí también pero la chica con la que me quería encontrar no estaba *Aishhh* pensé. Todos me miraron con deseo pero a la vez extrañados, Tae no dudo en decir algo.

-¿A donde vas tan arreglada?- me dijo llevando una cucharada del cereal a su boca.

-Bueno... Yo....- dije pensando en excusas, solo venían ideas absurdas. -...No iré a ninguna parte...- dije sin mas nada que argumentar, todos me miraron sin importancia. Me quedé en la sala, sentada en el gran sofá que combinaba muy bien con mi estilo.

-¿No estaban durmiendo?- pregunté de la nada.

-Sep, pero una visita nos despertó- dijo Taehyung de nuevo. Todos se encontraban comiendo algo, menos Jungkook quien no se encontraba en la sala. Yo decidí subir a dormir, estaba cansada y enojada a la vez, creerán que soy una sumisa, una chica que se vistió así solamente para llamar la atención de los hombres.

Entré al cuarto donde estaba Jungkook, aun se encontraba viendo su teléfono, yo voltee mi mirada. Ni se molesto en saber quien era, ni siquiera miro para atrás.

-Enserio...- dijo -¿Enserio romperás conmigo?- dijo quitando su vista de la pantalla.

-Jungkook, estoy cansada, quiero vomitar, no estoy de buenas y solo quiero dormir- dije de mala gana.

Él se colocó en frente de mi, muy de cerca.

-Dímelo, ¿Ya no te gusto?- dijo mirándome a los ojos. Yo no le hice caso alguno.

-¿Que parte de "Estoy muy cansada, quiero vomitar, no estoy de...- sentí como unos labios se apegaron a los mios, eran los de Kook, lo raro es que... No sentí ese tipo de zoológico que siempre sentía en mi estomago cuando el me besaba, no sentí nada, ni me moleste en cerrar mis ojos. Él abrió sus ojos y se dio cuenta de lo incómoda que estaba.

-¿Ya no sientes nada, verdad?- dijo desanimado. Yo solo quite mis tacones, lo mire sin decir nada mas y me acosté al lado contrario. Cerré mis ojos sin pensar nada y me quede profundamente dormida.

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