Caí hacia atrás después de prominente empujón, y digo de fuerza y rapidez, Connor me estrechó entre sus brazos antes de caer estrepitosamente por las escaleras, haciéndome un daño real.
Connor me mantenía firmemente agarrada desde atrás, por lo que no podía ver su cara, y mis manos instintivamente se habían aferrado a sus brazos grandes que me rodeaban desde atrás por la cintura. Su respiración me daba de lleno al oído, por lo que sentí su jadeo y suspiro cuando afirmé estar bien, pero algo estaba pasando, porque él no se relajó del todo y seguía aferrándome a su cuerpo.
- ¿Acaso no puedes tener más cuidado? - casi rugió Connor.
El chico al cual aún no miraba chasqueó la lengua dando a entender que no le interesaba lo que él dijera.
- ¿Dónde está mi madre? - preguntó Connor en una voz tan fría que se me congeló hasta el alma.
- ¿Qué...?
Tardé dos segundos en darme cuenta de que no me hablaba a mi... Lo cual fue bueno porque me dio tanto miedo esa voz que ya veía que me ponía a llorar de solo pensar que se dirigía así conmigo.
El chico que estaba frente a nosotros era de acero... Literal. Iba solo con una toalla envuelta en la cintura lo que dejaba al descubierto su six-pack. Aún goteaba en algunas partes, pero no tomé interés en observarle mucho, algo me decía que su relación con mi no... Con mi ex novio no era buena.
- Supongo que en la alberca junto a los demás. - respondió el chico con voz burlona. - ¿No me presentas a esta belleza? - preguntó él.
¿Belleza? ¿Se refería a mí? ¡¿El esteroide con patas me dijo belleza a mí?!
Él me guiñó el ojo.
Agh. Eso ya fue mucho.
😑😡😠
- Belleza mis calzones, zopenco. - gruñí.
Connor me tomó bien de la cintura y bajamos juntos las escaleras, no sin antes despedirnos del chico con una mirada asesina.
- Así que tú primo... Lo lamento, pero es un idiota. - gruñí.
- No hay problema. Ya lo asumí. - gruñó enojado por lo ocurrido.
- ¿Cómo es que no lo conocí? - preguntó mirándolo hacia atrás ya que aún sujeta mi cintura firmemente.
- Porque en cada reunión familiar a la que te llevaba, yo era el encargado de las invitaciones. Y casualmente siempre lo olvidaba a él.
- ¿Y por qué no lo hacías? O sea, sé que es un idiota, pero es tu primo, quizá podrías enseñarle buenos modales o algo. - suspiré. - ¿Pasó algo entre ustedes? No parecía un simple pleito familiar, sino más del tipo personal.
- Jessica, no estás en posición de preguntar nada, te recuerdo que nosotros ya no somos nada. - recalcó fastidiado.
- ¿No? - pregunté.
- No.
- Entonces quita tus manos de mi cintura si es tan así. - susurré pícaramente.
Sé que por un lado debía estar enfadada, pero me daba gracia todo esto. Podía fingir el odio más grande y puro hacia mí, pero en el fondo, los dos sabíamos que nos era difícil no actuar como pareja, después de todo, lo fuimos por mucho tiempo. Y sin importar los problemas, en el fondo, y aunque él no lo admita, sabe que soy inocente. Por lo que su amor sigue intacto... Pero mi orgullo y amor propio no, por lo que es imposible que algo más pueda existir entre nosotros.
Fuimos hacia donde se escuchaban voces, lo cual nos llevó a la alberca.
Oh. Cielos. No. Puede. Ser. Yo. Me. Mato.
La linda prima de Connor, venía corriendo hacia él (por favor nótese mi sarcasmo), con sus pechos saltando escandalosamente, y con un bikini morado diminuto.
Ejem, asco, ejem.
- ¡Connor! ¡Qué alegría tenerte aquí! - chilló mientras lo abrazaba estrellando sus operados pechos contra mí no... Contra mi ex.
- Sí, Cathya. ¿Me puedes decir dónde está mi madre? La estamos buscando. - preguntó tratando de escurrirse de sus brazos, pero ni con lubricante ella lo soltaría, y aquí es donde entraba yo, con mi armadura y corcel al rescate.
- Oh, mi vida, - dije tomando su mano a lo que ella le fue imposible seguir ignorandome, así que lo soltó. - creo que MÍ suegra está por allí, vamos. Un gusto, Cathya. - sonreí falsamente llevándome a Connor de allí.
- ¿Dónde viste a mi mamá? - preguntó.
- No la vi.
- ¿Entonces porqué...?
- No preguntes. - avisé antes de que terminara de formular la pregunta que yo jamás admitiría en voz alta.
Él me miró confundido pero no objetó nada.
Caminamos un rato hasta que la encontramos recogiendo un ramito de menta que había.
- ¡Jess, Connor! - exclamó contenta. - Tanto tiempo que no los veía... O por lo menos no juntos. ¿Cómo has estado, Jess?
- Eh... Bien, gracias, ¿Y usted? Nos preocupó mucho su llamada y vinimos lo más rápido posible. ¿Pasó algo? - pregunté preocupada. Sip, tal vez le estaba tomando el lugar de Connor al preguntar, pero ella era tanto para mí, y el idiota este tiene mucho que pagarme... Además no me importa lo que piense, yo quiero saber si algo le pasa a mi suegra.
- ¡Oh! No, en realidad no pasaba nada, solo lo hice porque hace ya rato que no los veía, y bueno, Connor nunca viene ni te trae cuando hacemos las reuniones familiares completas, así que vi la oportunidad y dado que estaban juntos... Maté dos pájaros de un solo tiro.
Su sonrisa era enorme, pero nuestras caras estaban completamente deformadas. Ella nos engañó...
Una hora más tarde estaba con Connor en una habitación, sentados en la cama y sin la menor idea de qué hacer. Por un lado, Connor quería mantener a su primita alejada, pero por otro no me quería cerca, y yo no quería a la prima de Connor cerca de él, pero a él lo quería lejos de mi... Ah, la vida es tan complicada...
- Bueno, creo que llamaré a Danny para que venga a buscarme, debo entrenar y en tres días será el partido final, así que debo irme. - dije mientras me levantaba de la cama.
- Ah, no. Tú no te irás de acá. En primer lugar, por ti es que estoy aquí, y en segundo... - dijo mirándome con malicia ahora. - Soy tu novio y le dijiste al doctor que te cuidaría... No puedo faltar a eso ahora, ¿no crees, cariño? - preguntó con sorna.
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Hola!!!Buuueno, ya veremos en el próximo capítulo qué pasará.
Se quedará Jess en la casa de campo???
Por favor dejen sus comentarios y no olviden votar, que ya se pone picante la cosa.
Trataré de subir otro capítulo por los días feriados, pero no prometo nada.
Espero y les guste, y hasta el próximo capítulo.
Nos leemos!!!
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¿Me Devuelves A Mi Novio?
De TodoTodo es muy complicado. ¿Qué pasaría si por un mal entendido, se intercambiaran parejas entre amigos? Jessica, es una chica simpática, amable, pero sobre todo, con mucho carácter y orgullo. Junto con su mejor amigo Danny, se ven envueltos en un m...