XV

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C A P Í T U L O    15







Celine.

Mi corazón palpitaba rápidamente y no exactamente de emoción. De hecho sentía el rubor en mis mejillas y eso lograba avergonzarme. Nunca espere que confesara que yo le gustara después de todo es James y no se ve de ese tipo de chicos.

El haberme traído a su lugar especial y haberme confesado que le gustaba me hacía pensar que de verdad era enserio y no me estaba jugando una mala broma.

Trague saliva nerviosa y me quede en silencio, no podía decir lo mismo porque James no me gustaba, o al menos eso tenía claro hasta este entonces.

—¿Por qué estabas en la biblioteca?.

Bien Celine, eres un asco tratando de evitar temas.

Escuche a James reír y lo mire de reojo desconcertada.

—Solo di que no te gusto Celine, —hablo mirándome con una sonrisa, —no tienes por qué evadir el temas, además eres muy mala haciéndolo.

—Yo...no, es solo que—

—Aunque no te gustara lucharía de todos modos para que fueras mía, Celine, —susurro en mi oído, trague saliva y reí nerviosamente mientras me levantaba de sopetón escapando de ese momento tan incómodo. Le di la espalda escapando de esos ojos grises.

—Es un paisaje digno de pintar, ¿no crees?, —gire mi cabeza hacia el mirándolo de soslayo.

El me miro y sonrió negando con la cabeza.

—Estaba en la biblioteca porque tenía que ir a avisarte que no era necesario que cuidaras a Trish ese día porque mis padres la iban a llevar a un cumpleaños,— mi sonrisa desvaneció lentamente al escucharlo.

Puse mis manos en las carteras de mi chaleco y mire los últimos rayos de sol.

—¿Por qué no llamaste a mi teléfono?.

—No tenía mi teléfono conmigo, lo había dejado en mi casa, —suspiro, —tal vez creas que te estoy mintiendo pero es la verdad Celine, confía en mí.

—¿Cómo lo hago?, ¿Cómo sé que no me harás daño si confió en ti?.

Lo escuche ponerse de pie, me gire hacia él, sus ojos brillaban aún más con el reflejo del sol.

James estiro su mano hacia mi mirándome,— Si estás aquí es porque confías en mí, de lo contrario no te hubieras subido a mi auto.

—Me subí porque tenía curiosidad.

Sus ojos me miraron esperando que tomara su mano pero no lo hice así que la fue bajando lentamente. El sonrió y guardo ambas manos dentro de los bolsillos de sus jeans.

—Cuando entre a la biblioteca comencé a buscarte pero solo encontré a Thomas, le pregunte pensando sobre ti pensando que me respondería pero no lo hizo, creí que me estaba ignorando así que me acerque a él pero cuando lo hice y lo moví lo vi ahí desangrándose sobre la mesa. En ese momento intente levantarlo y llevármelo pensando que tal vez podría salvarle la vida pero al tomar su pulso no había nada más que hacer, el ya había muerto, —su expresión era neutra, —salí de la biblioteca buscándote pensando que te podría haber sucedido algo pero no te encontré.

—¿Ibas con Carl?.

El asintió, —el me acompaño al instituto a buscarte.

¿Estaba segura que decía la verdad?, no, una parte de mi le quería creer pero la otra me decía que no, que no creyera ninguna de sus palabras.

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