James y Lily

Capítulo 31

-¡Y no olvidéis hacer la lista de 10 ataques de defensa! ¡Acordaros!- gritó el profesor, mientras la alarma sonaba y todos los alumnos se levantaban para irse.

Era Lunes 12, mediados de Enero. El tiempo lo confirmaba: tras las ventanas de los pasillos y clases, el césped verde había sido sustituido por una manta blanca de nieve. Los árboles contaban con copos de nieve y escarcha entre sus hojas, y el lago se encontraba a una temperatura que impedía meterse a cualquier persona.

James Potter se levantó de su mesa, con su mochila colgada al hombro. Busco con la mirada a Jess, con quien compartía esa clase de Hechizos. No tardó en encontrarla esperando en la puerta.

-¿Qué hay?- dijo James en forma de saludo llegando a donde ella se encontraba.

-Un minuto más de clase y yo misma me lanzo un Avada Kedabra. - dijo Jess, que llevaba un par de libros y una carpeta en su brazos. Salieron al pasillo, era la hora de comer, y estaba todo el pasillo lleno de alumnos que salían de clase.

-Me han dado ya la fecha del partido contra Hufflepuff.- comentó James, exquivando a un par de alumnos de primero que iban corriendo por los pasillos.

-¿Ah sí?- preguntó ella.

-Ajá. -continuo él- El Sábado 23. Mañana lo harán oficial, por ahora solo lo sabemos Mcgonagall, Sprount, su capitán, tú y yo. -James y Jess se pararon en la salida de una clase, la de pociones. Algunos alumnos salían entonces de ella.

-Va a ser tu primer partido saliendo con Lily...- canturreo Jess en tono de niña pequeña apoyándose en el marco de la puerta.

-Sí...- río él.- Oye estaba pensando...- James asomó la cabeza por la puerta- El 30 es el cumple de Lily. Podríamos hacer algo.

-¡Una fiesta!- animó Jess. Las fiestas de los Merodeadores eran las mejores de Hogwarts. Tenían una reputación muy alta.

-No descartaré esa idea, pero no sé... Estaría mejor algo más privado, como lo del Sábado.-opinó James.

-Yo lo veo...- dijo Jess mirando a un punto fijo de el techo, imaginandolo.

-Hola.- dijo Lily saliendo de la clase.

-Hola.- le contestó sonriendo James dándole un beso tierno en los labios como saludo. Un par de personas se quedaron mirándolos.

Desde hacía cuatro días, todos sabían que James y Lily estaban saliendo, al igual que sabían que entre Sirius y Jess había algo, ya que Sirius no se molestaba en ocultar alguna muestra de cariño que otra. Pero era Sirius Black, nadie apostaba más de una semana por ellos.

-A ver, no me apetece mucho hacer de sujetavelas.- comentó Jess. Enfrente de la clase había una ventana, donde se acercaron. Lily rió por el comentario y se sentó en la repisa de la ventana, con James de pie a su lado y Jess en frente de ellos.

-¿Qué tal la clase?- preguntó Lily a Jess.

-Bueno...

-¿Has visto a David? ¡Tenía aún una venda en la cara!- dijo riendo James.

Jess y Lily rieron.

-Lo he visto, estaba en...

-Hola, princesa.- Sirius le susurró a la oreja por detrás,  para despues empezar a besarle en el cuello. Jess rió mientras él le pasaba las manos por delante, para abrazarle por la espalda.