James y Lily

Capítulo 36

-¡Y este es el pasillo de el segundo piso!- James, vestido perfectamente con su túnica de Hogwarts, se asomó al pasillo, junto a Luka, un chico muy atractivo.- No hay gran cosa, al fondo a la izquierda tenemos la segunda clase de historia, clase que no usamos nunca, teniendo la primera. También esta el baño de las chicas, pero esta "Myrtel, la llorona", no es muy recomendable entrar...

Luka río.

-No lo haré, tranquilo.- le aseguro en tono bromista.

-Buen chico.- rió James. Luka era bastante majo. Sabía mucho de Quiditch, por eso siempre tenía un tema de conversación con James.

-En fin, ¿Puedes hacer un resumen de tu primer día de colegio en Hogwarts?- le preguntó James, dirigiéndose hacía las escaleras para ir a la Torre Gryffindor.

-A ver... Mcgonagall da bastante miedo, Sprount me pone un poco nervioso con su optimismo, y Horace es majo pero...

Esta vez fue James quién rió.

-Genial, en dos días en Hogwarts has calado a los profesores. Aprendes rápido, Jonhson.- bromeó James.

Siguieron subiendo escaleras, con cuidado de que no cambiaran el rumbo a mitad camino.

-¿Estás saliendo con Lily?- preguntó Luka.

-Sí...- sonrió mirando al suelo, pensando en lo precioso que era contestar un "sí" a esa pregunta. La pregunta que tanto tiempo había esperado. Su pregunta.

-Es muy guapa. Y por lo que he podido ver en clase, inteligente.

-Sí, sí lo es.- le contestó James sonriéndo- Es como... Una abominación de las cuatro casas. Es inteligente como la mejor Ravenclaw, valiente, capaz de dar su vida por un ser querido como un Gryffindor. Astuta cuando quiere como una Slytherin, y tiene la amabilidad de Hufflepuff...

-Joder, tío.- dijo Luka, llegando a la pared con el recuadro de la dama gorda.

-Perdon, se me ha ido.- rió James.- Emmm... ¡Caramelo de calabaza frita!

La puerta se abrió y entraron allí. Había poca gente, relativamente comparado con la cantidad de personas que solían estar allí. Aunque teniendo en cuenta que era Lunes...

Junto a la chimenea, en el sillón granate, Remus reía de algo que intentaba explicar Lily. Ella estaba enfrente, en el otro sillón. Junto a ellos, en el sofá, Sirius en un extremo, y apoyada sobre él Jess, a quién Sirius pasaba un brazo.

-¡Hey!- les llamó Lily.- ¡Ya estáis aquí!

-Ajá.- afirmó James acercándose.- le he hecho un tour por algunas partes de el castillo.- sonrió, sentándose en el reposabrazos de el sillón de Lily y dándole un beso en la mejilla.

Luka por su parte se sentó en el sofa de Jess y Sirius.

-¿Y Colagusano?- preguntó James.

-Clases partuculares.- respondió Sirius.

-Joder...- murmuró James.

-Le han caído cinco...- aclaró el licántropo.

-Hey, Luka.- llamó Lily- ¿Has visto el estadio de Quiditch?

-Bueno...- el guapo rubio se rasco el pelo- Unicamente por fuera, parece ser muy grande.

-Espera.- dijo Jess, separándose de Sirius e incorporándose- ¿No lo has visto por dentro?

-No, aún no.

-Yo te lo puedo enseñar.- dijo la morena amablemente- Estoy en el equipo, vamos, si quieres.