James y Lily

Capítulo 51

-¡Lily!- una voz grave se oye de fondo. Escucha los pasos de gente corriendo. Se acercan. Cada vez retumban más y más.

-¡Avisar a Dumbledore!- una voz femenina suena, haciendo eco en las paredes. Otra vez se repite. Y otra. Y otra.

Más pasos.

Oye un cristal romperse. El crujido de los trozos en el suelo le es ensordecedor.

-Respira...- la persona que habla esta hiperventilando- Rápido, traer gasas y todo lo que podáis... ¡Rápido!

La imagen de ella misma viene a su cabeza. Todas las voces suenan a la vez, impidiendole escuchar atentamente cada una de ellas.

El cuerpo de Noelia ensangrentado.

Bellatrix sonriendo.

Los gritos de todas las voces de su cabeza.

Siente presión en la mano. Cada vez es más fuerte. Su mano le empieza a doler y los gritos no cesan.

Abrió los ojos. Un conjunto de imágenes borrosas y desenfocadas le llegaron a su cabeza. Ya no habían gritos, solo un leve murmullo en la sala. La luz ya no era oscura, un tono claro, azulado muy claro le envolvian.

Habian dos chicos sentados a ambos lados de la cama en la que le parecía estar tumbada. El de su derecha, miraba fijamente su mano y el de la izquierda miraba a este otro.

-Canuto, le vas a hacer daño...- advirtió el moreno de la izquierda.

-¡Chsss!- le contestó el de la izquierda, peñizcandole la mano a Lily. La pelirroja no se encontraba con fuerzas ni siquiera para quejarse.

-Repíteme, por favor, la gracia que hay en pellizcarle la mano a una persona inconsciente.- preguntó James divertido, apoyando su cabeza en su mano.

Sirius, el de la derecha le miró como mira una madre a un niño impertinente.

-Ya te lo he dicho, es un experimento científico.

James se aguantó la risa.

-¿Qué hay?- dijo Jess entrando por la cortina. Llevaba todo el pelo recogida en una colteta, y unas ojeras ligeramente marcadas.

-Nada, tu novio el científico, que está haciendo "experimentos" con el cuerpo inconsciente de tu amiga.- le contestó James como si fuera normal.

Jess miró a los dos. Francamente, no sabía como contestar.

-Sirius, le vas a hacer daño...- dijo ella, en tono de obviedad.

-Gracias.- sonrió James al ver que su amiga le daba la razón.

-¡Qué no!- se defendió Sirius- Es un experimento serio...

-Canuto, tío, llevas mucho tiempo sin dormir, ¿Por qué no...?- comenzó James en un tono divertido, con la risa de Jess de fondo.

-¡Cornamenta! -le llamó la atención- ¿Te imaginas que ahora por algo tan simple como un pellizco, salga de su trance diciéndo algo como "Sirius, eres subnormal"? Podría pasar.

-Sirius, eres subnormal. - dijo Lily con un tono de voz leve y seco. James se giró muy bruscamente.

-¡Lily! Cielo, ey, ¿como estás?... -comenzó James a hablar muy rápidamente.

Jess se tiró a abrazarla mientras le daba besos en la cabeza.

-Madre mía, madre mía... ¿Te encuentras bien? ¿Cuántos dedos tengo aquí? - Jess alzó dos dedos y comenzó a moverlos.