James y Lily

Capítulo 44

Abrió lo ojos dos segundos.

Estaba solo en su zona de la mesa, pero por lo demás estaba lleno. La gente se movía y hablaba a gritos. Pensó que la cabeza le iba a explotar.

Volvió a cerrar los ojos y a recostar su cabeza sobre su mano. Esperó otros cinco segundos y volvió a abrirlos. Todo seguía igual. Repitió eso otra vez pero en esos cinco segundos la escena era diferente.

Enfrente de él se sentaban dos personas, tuvo que enfocar bien su mirada para verlos. Hablaban como si él no estuviera ahí.

Uno de ellos, guapo, moreno y ojos grises, tenía la misma cara que él, aunque con más ánimo. Seguramente, Sirius no bebió tanto, pensó. A su lado con rizos rojos y una energía positiva y pegadiza, Lily le sonreía.

-Remus...- chascó los dedos un par de veces ante sus ojos.

-¡No grites...! - dijo cansadísimo, pasándose una mano por el pelo.

-Parece que alguien no aguanto bien anoche...- bromeó Sirius echándose zumo de calabaza en su vaso.

-Yo no estuve media noche entreteniendome haciendo dios sabe que con Jess.- le contestó Remus en tono secó, provocando la risa de Lily.

-Touché- le respondió Sirius sonriéndo con orgullo. -¿Ya se ha ido el rubio teñido, no? Cuando fui a la habitación sus cosas ya no estaban.

Remus hizo un ruido cómo diciendo "sí".

-Genial... Otra vez los cuatro, sin Luka, ni nadie más...- dijo Sirius bebiendo de su zumo. Lily le echó una mirada que decía "¿Ah, sí?- con una ceja levantada- Cinco.- corrigió él. Lily levantó otra ceja- ¡Seis! No le digais que me olvidado de ella... - dijo Sirius con un toque de temor en su voz.

Lily volvió a reír. Estaba feliz. No había problemas. Era como si la amenaza de una futura guerra se hubiera detenido, no existían los mortifagos, los problemas, los celos, nada. Sólo estaba ella con su novio (Qué aún le parecía raro llamarlo así), su mejor amiga desde los once, Remus uno de sus mejores amigos, Sirius quién le aportaba la mayoría de risas y Peter que era un buen amigo.

-¡Hola!- saludó amablemente Jess acercándose a ellos con James y Peter. James, llevaba la misma cara y humor que Remus.

Se acercó a Sirius para darle un tierno beso en los labios. Desde aquella noche y la proposición de Sirius su relación iba mejor que nunca.

Peter y James se sentaron junto a Remus. Lily observó esa imagen, Remus y James con caras de no poder con su vida y Peter atriborrandose de bacon para el desayuno.

James se pasó una mano por la cara intentando despejarse.

-Quiero morir.- murmuró.

-Normal, con la borrachera que te pegaste...- contestó Jess sirviéndose.

-No bebí tanto.- se defendió James.

-¿Ah no?- dijo Remus, volviendo a abrir los ojos.- Empezastes a coquetear con Lily.

-Bueno, es mi novia...- intentó defenderse.

-Le preguntaste si tenía novio.- continuó Remus- Te dijo que no, y te pusiste a llorar.

James le miró con el ceño fruncido, no se acordaba de nada pero no creía que su borrachera hubiera llegado a ese punto.

-Yo no...- intentó defenderse James.

-Tú sí...- le contestó Lily asintiendo.

El moreno aguardó unos segundos en silencio, pensando.