MOMENTO 23

15 4 0
                                    


Luzelba, la religiosa amiga de mi mama, paso a buscarla en su Sedan quince minutos después de vestirnos. Mi mama insistió en que no fuera casa de Greiger a pie, a pesar de que quedara muy cerca.

Me fui con ellas y me dejaron en mi destino. Me despedí y me baje de vehículo, se fueron y me dirigí a casa de Greiger, de nuevo irritada por las preguntas de esa señora entrometida. La gente enserio no sabe cuánto odio eso, bueno, al menos pasare una gran tarde y noche con mi novio.

Me dirijo a la puerta, toco el timbre y espero a que me abriera, y este a la par de dos minutos me abrió la puerta y me recibió de la mejor manera.

—Hola mor

—Hola, estas hermosa.

Nos saludamos y ambos nos damos un beso en el cachete.

—Gracias —le digo.

—No hay de qué.

Yo le sonrió y él me sonríe. Percibo como me emociono porque estoy con él. Veo que también esta emocionado y penoso.

—¿Quieres pasar? —me pregunta y yo aprovecho en ser cómica.

—No, me quedare en tu patio.

—Haaa ok,

Él se mete en su papel y cierra la puerta en mi cara.

Me quedo afuera callada, con una gran sonrisa dibujada en mi cara. Pasa un rato y yo me pregunto.

—¿Sera que enserio me dejara afuera de su casa?

Entonces el abre la puerta y me ve, frente de su casa de paredes blancas y ventanas pequeñas.

—Pasa...

Camino adelante y entro a su casa, decidida más que averiguar.

GRACIAS POR LEER SE LES QUIERE

NOCHE PARANORMAL©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora