MOMENTO 30

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A la mañana siguiente Greiger recibió un mensaje de sus padres, diciéndole que no volverían si hasta después de las una de la tarde, ya que la fiesta seguía.

Greiger y yo después de comer los panes con queso frio a y mantequilla a las 5am, dormimos un buen rato hasta las ocho y a partir de esa hora, cuando nos despertamos animados, decidimos trotar un poco para despejar la mente.

[10 minutos después]

Trotamos por toda la gran manzana y el mercado, hasta que Greiger, me dijo que fuéramos al cementerio a visitar a su difunto abuelo. Dije que si, como yo también pasaba por lo mismo aproveche, para así después de un tiempo también visitar a mi abuela.

Ambos caminos entre las lapidas del cementerio; llamado "El jardín de Recuerdos" hasta que llegamos a la que él quería.

"SE VE IMPOSIBLE, HASTA QUE SE HACE".

Fue lo primero que leí en el segundo que vi la lápida de su abuelo. Greiger fue adquiriendo una compostura débil y afligida. Me quede en silencio, mientras mirada a los alrededores, dándome cuenta que en nuestro entorno había mucha muy bien vestida, mayormente gente mayor. De la nada eso me causo escalofríos y ganas de hablar con todos ellos, sin saber la razón.

—Lo extraño mucho —dice Greiger de repente.

—Lo sé, se ve en tu cara —le replico viéndolo —. El de seguro estaría orgulloso de ti.

—¿Por qué? —pregunto.

—Algo me dice en mi parte interna que lo está —respondo mientras me refresca la briza.

Después de esa charla fui a ver a mi abuela y juro que casi lloraba, para formar una escena dramática que yo con todas mis fuerzas evitaba hacer. Pero como toda actriz merecedora de un futuro Óscar que soy, actué como toda una profesional, hasta que Greiger me llamo diciendo que había encontrado algo, que yo como ya le lo dicho antes, como una entrometida lora quise averiguar.

NOCHE PARANORMAL©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora