XX. Mudanza.

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Eran inicios de 1747 y el palacio dentro de algunos meses estaría listo, no lo había visto para que la primera vez sea única, aunque Prusia me insistió muchasss veces pero con el tiempo he aprendido a aguantar más.
Entonces en mis tiempos libres empecé a ordenar que cosas quería en mi nueva residencia, cuáles se quedarían y algunas cosas nuevas, tal vez otra sala, algunos candelabros, un gran piano! Y y y y UNA NUEVA SILLA! Si! .

Acababa de terminar mi trabajo, me paré y me dirigí a la sala que mi padre sello hace mucho tiempo, yo ya tenía la llave pero hoy será la primera vez que entré en ella, no sé pero hay dos salas cerradas en el palacio, está y otra de la que no sé nada pero después veré cómo abrirla.

Ahora esta antigua habitación tal vez tenga algo que me gustaría en Sanssousi... aunque lo dudo, es más por curiosidad, algo que mi padre no quiso que viera. Cuando llegue a la puerta, oí un chillido desde una ventana, ahí estaba Gilbird quien bajo hasta mi hombro.

- Hola, ¿Qué ocurre?

Él solo me observó unos instantes y rápidamente me quito las llaves de las manos y salió volando...

-GILBIRT!! VUELVE!.

Y así corrí tras de él, obviamente acabamos en... Mi biblioteca, cuando entré vi a un Gilbert sentado, leyendo, con la ventana tras de él, dándole un resplandor especial a su blanca piel, se veía como un ángel en la tierra, volteó a verme y me sonrió, esa sonrisa acabó con lo poco de orgullo que tenía en ese momento y me puse rojisimo. Obviamente lo noto enseguida.

- ¿Te gusta lo que miras?
- Sí.
...

¿! QUÉ ACABO DE DECIR?!!

Moriré de la vergüenza, últimamente me he sentido algo incomodo al ver a Prusia aaa esti no puede ser así,  miré a Gilbert para oír su estridente risa pero nunca llegó solo estaba él con la cara casi tan roja como la mía, aaaaaaaaaaa así se ve más lindo, creo que es la primera vez que lo veo tan rojo, sacudí la cabeza tratando de sacar cualquier pensamiento raro que se generar de esta situación. 
Todos callamos por un instante, muy incómodo, creo que fueron los segundos más largos de mi vida...falso, eso fueron cuando mmm bueno cuando lo perdí, pero ahora solo nos estábamos mirando intensamente hasta que Gilbird decidió romper el silencio chillando y sacudiendo las llaves frente a Gilbert.

- eh? Mm ,¿ Acaso son las?

Gilbird solo asintió y Gilbert se paró de golpe, tomó las llaves.

- SÍ! bien hecho, vamos a abrir esa puerta.
-ehh? Esas son mis llaves.
- Vamoss Fritz, conozco este castillo como a mí maravillosa persona PERO desde que vivo en el ,hay 2 cuartos cerrados con llave. Uno! El cuarto donde el maravilloso yo tiene sus estupendos y fantásticos diarios. Y dos el que tú abuelo selló hace años.
EL ASOMBROSO YO TIENE QUE SABER QUE HAY DENTRO!!

- Con razón esa extraña habitación, no importa, si ni mi padre, ni mi abuelo te dejaron entrar debe ser por algo así que no.
- Pero Fritzzzz, por favorrrr.
- No y ya dame eso.
- ... ( (*+*))
- Dámelo Prusia.
- Kesesesese de acuerdo, su majestad.
-eh?

Gilbert se empezó a acercar, puso las llaves en su bolsillo, tomó mi mano, me miró a los ojos, se estaba acercando demasiado cuando

Hecho a correr fuera de la biblioteca.Me quedé pasmado un segundo, estuvo tan cerca de de mmm ... AÚN TIENE LAS LLAVES.
Y así volví a correr hacia el cuarto pero cuando llegue , Prusia estaba abriendo la puerta, trate de detenerlo pero en vez de eso caímos dentro de la habitación en una posición mmm inconveniente.

- Kesesesese ya estamos dentro.
- Tú!!
- Vamos Fritz, sabes que no me rendiría.
- agggg, lo sé pero podrías obedecer me una vez.
- Que tal si es al revés.                                                                                                                                                          -Soy tú rey                                                                                                                                                                                -Kesese si y solo te obedezco a ti

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