Eres Mía.

Capítulo 23.

-Shh, shh...

-Y luego me dijo jajaja.

-¡Que Shh! -Exclama mi novio con su celular en la mano.

¡Steven dice que ya vienen!

Todos abrimos grandes los ojos y terminamos con los adornos de la casa, los últimos los echamos dentro de un bote de basura para terminar pronto.

Todos tratamos de escondernos en los muebles, detrás de los sofás y en recovecos de la sala.

Hoy es el cumpleaños de Rosie y como lo prometimos organizamos una fiesta sorpresa para ella, en su hogar.

Para empezar, cambiamos de color la casa, era color amarillo huevo y ahora es azul cielo, cambiamos absolutamente todos los muebles y donde era la habitación de sus padres se convirtió en una sala de juegos, creo que es un buen regalo por su cumpleaños 18.

Apenas y escuchamos unos murmullos y la puerta principal ser abierta, todos saltamos de nuestros lugares gritando. -¡Sorpresa!

La cara de Rosie denotaba alegría y entusiasmo, soy la primera además de Steven acercarme a ella y decirle cuanto la adoro.

-Jamás pensé que harían esto. -Dice Rosie sonriendo excesivamente. -Por Dios, ¡miren la casa!

-Oh sabía que te encantaría. -Digo llevándome el crédito.

-¡Dios me encanta! -Exclama antes de volver a abrazarme.

Respondo a su abrazo inmediatamente y ella me susurra en un montón de veces muchas gracias.

Mi vida, si tú supieras que esa sonrisa compensa todo esto.

Los demás comienzan a acercarse a ella para abrazarla y felicitarla. Alejo, Scott, Sebastián y entre muchos otros compañeros y alumnos de la escuela.

La fiesta pinta para estar muy bien, colocamos globos con helio en toda la sala, llenamos las barras con snacks y Sebas y Scott trajeron botellas de Vodka y Ron.

Yo tomo un lugar detrás de una de las barras donde está un enorme pastel de chocolate y mango.

-¡Ya te vi! -Exclama Alejo detrás de mi, quizá vio que le metí uno de mis dedos al pastel para coger un poco de crema batida.

Pongo mi dedo en la boca para comerme el dulce que he tomado y sonrío. -Solo me aseguro que no vaya a tener mal sabor. -Me encojo de hombros.

Alejo ríe un poco y hace lo mismo que yo hice hace un par de segundos. -¿Y cómo van las cosas con tu novio? -Pregunta.

-Bien. -Respondo buscándolo con la mirada.

Mi novio está frente a nosotros con unos amigos, Steven entre ellos, él luce tan guapo, el más de todo su grupo de amigos, o de las personas que están con él. Joder el más guapo del mundo.

Sostiene sobre su mano un vaso plástico con alguna clase de refresco o alcohol dedujo.
Steven le dice algo y él ríe un poco negando.
Levanta su vaso para tomar encontrándose conmigo, tiene esos ojos que me obligan a mirarle.
Me sonríe antes de dejar su bebida en una mesa de centro y encaminarse a nosotros.

-Como te tienen. -Dice Alejo haciéndome que lo voltee a ver.

Sonrío. -Es que es muy guapo.

-Si... -Responde mi amigo alargando y viendo en dirección a él. -Quizá pueda robártelo.

Lo que dice me hace toser un poco. -¿Robarle el novio a tu mejor amiga?

Alejo sonríe negando y levanta los hombros en respuesta.